Euskadi contará con un Centro de Fabricación Avanzada (CFA) Eólico, que se ubicará en la empresa IK4-Tekniker de Eibar y tendrá una inversión inicial de 4,5 millones de euros, aportados íntegramente por el Gobierno Vasco.
A la presentación de este nuevo centro, con el que el Ejecutivo vasco comienza a implementar la estrategia de fabricación avanzada en la Comunidad Autónoma, ha acudido la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantza Tapia.
Este CFA Eólico se ha impulsado junto a ocho empresas vascas -Antec, Gamesa Electric, Gamesa Transmission Systems, Hine, Glual, Lau Lagun y Wec-, el Clúster de la Energía y el centro tecnológico IK4-Tekniker.
Su propósito es “mejorar el posicionamiento tecnológico de Euskadi”, de forma que se sitúe “como país de referencia en el sector eólico gracias al potencial y capacidad de desarrollo de los proveedores vascos”.
El departamento de Tapia asume esta estrategia “como uno de los principales pilares para la mejora de la competitividad de la industria vasca”.
Explica que este CFA “dota a Euskadi de infraestructuras específicas de alto valor añadido donde poder validar, trabajar el escalado industrial y testar avanzadas técnicas de fabricación, combinando las prioridades establecidas de especialización, como son la manufactura avanzada y la energía”.
El centro se apoya en “tecnología punta a nivel mundial” e IK4-Tekniker se encargará de su gestión operativa, mientras que el clúster de la Energía asumirá la gerencia y acciones de representación del sector y coordinador de la iniciativa.
Los costes se financiarán con el cobro de los servicios a los usuarios, las cuotas anuales de socios y los programas de apoyo en I+D a los que se pueda acceder en las diferentes administraciones.
Se constituirá como una fundación sin ánimo de lucro, cuyos socios serán las entidades impulsoras, que tendrán “prioridad absoluta en el uso de las infraestructuras del centro”, aunque estará abierto a cualquier empresa interesada en probar su producto, precisa el Gobierno Vasco.
Los “objetivos operativos” del Centro de Fabricación Avanzada Eólico son “disminuir el CoE (Cost of Energy) de la energía eólica a través de la mejora de los componentes y subproductos críticos de aerogeneradores desarrollados por proveedores vascos”, además de facilitar a las empresas de Euskadi el acceso a “equipamiento punta” que normalmente no tiene a su disposición.
Busca también “permitir a los proveedores vascos de eólica ensayar sus nuevos desarrollos en las condiciones más cercanas a la realidad posibles y de esta manera demostrar la calidad de sus productos ante los OEMs (fabricantes de equipamiento original)”.
El Ejecutivo vasco señala que la elección de Eibar porque contar con IK4-Tekniker “minimiza” las inversiones al contar con una infraestructura ya existente y con espacio y equipamiento disponible.
Se ha tenido también en cuenta, entre otras cuestiones, “la disponibilidad cercana de personal técnico para realizar la operación y mantenimiento del equipamiento del CFA, así como para prestar servicios cualificados adicionales a las empresas usuarias”.
El Centro de Fabricación Avanzada Eólico contará con un taller especialmente diseñado y preparado para montaje y ensayo de grandes subsistemas de unas dimensiones de 90 metros de largo, 14 de ancho y altura de 12,2 al gancho de la grúa.
Dispondrá de dos grúas de 40 y 10 toneladas, que posibilitarán la manipulación de piezas grandes y pesadas.
Además, se habilitará un taller de ultraprecisión, un laboratorio de metrología dimensional especializado en mediciones de gran volumen, así como de laboratorios de diagnóstico.