Un hombre de 36 años ha sido detenido por la Ertzaintza después de que, tras acudir a la vivienda de su expareja en Ermua para llevarse sus objetos personales, arremetiera a golpes contra el mobiliario y rompiera dos televisiones, un ordenador y otros enseres.
El detenido, que tenía una orden de alejamiento de su expareja, ha sido arrestado acusado de un presunto delito de quebrantamiento de este dictamen judicial y de causar daños en el interior de la vivienda, según ha informado hoy el Departamento de Seguridad.
Los hechos ocurrieron ayer, martes, cuando la mujer autorizó a su expareja a que acudiera a la vivienda que ambos habían compartido para sacar sus pertenencias y llamó posteriormente a la Ertzaintza ante el comportamiento de su excompañero sentimental.
Cuando los agentes se personaron en el piso, la mujer se encontraba fuera de la vivienda y en el interior comenzaron a escucharse ruidos de la ruptura de objetos y cristales.
El hombre, que en principio se negó a abrir la puerta y mantuvo la cerradura del piso bloqueada, abrió posteriormente a los agentes de la Ertzaina, una vez que éstos pidieran ayuda al cuerpo de bomberos.
Tras acceder al interior de la vivienda, los agentes comprobaron que habían sido rotas dos televisiones y un ordenador portátil, así como cristales, armarios y varios espejos.