Hace veinticinco años murió CARY GRANT y con él toda una época del cine. Guapo, elegante, aparentemente culto, desinhibidamente frívolo, ARCHIBALD ALEXANDER LEACH, nacido en BRISTOL, INGLATERRA, en 1.904 representó como nadie el glamour en la pantalla, con un encanto que le hacía bordear el ridículo sin caer jamás en él. Fue un cómico excepcional, pero también la representación de la aventura distinguida y, en algún film, un villano sutil. Y fue todo eso sin despeinarse y sin alterar el gesto.
ARCHIBALD fue un niño muy pobre, nacido en una familia donde el padre era una presencia intermitente y la madre acabó en un manicomio. Quizá esa extrema pobreza le hizo ser el tacaño que denunciaron años mas tarde quienes le conocieron. Quizá su infancia le convirtió en el hombre inseguro y dubitativo que comentaban sus parejas.
A los catorce años comenzó a actuar en garitos, cantando canciones por unas monedas, ascendiendo en el escalafón de la miseria, hasta que llegó a LONDRES donde siguió con su empeño. Una de las compañías en las que actuó emprendió la aventura americana. Y allí, en NUEVA YORK, su fama creció rápidamente siempre ayudado por sus partenaires femeninas que, al parecer, caían fascinadas por su inevitable encanto. Y así llegó hasta HOLLYWOOD donde debutó en 1.932 en películas protagonizadas por LILI DAMITA o MARLENE DIETRICH. Ese mismo año conoció a RANDOLPH SCOTT con el que compartía reparto en SÁBADO DE JUERGA.
Durante un tiempo los dos actores compartieron casa por lo que se extendieron los rumores de que tenían una relación homosexual. El estudio para el que trabajaban decidió hacer una sesión de fotos que mostrara su “viril” forma de vida, pero esas fotos parecían confirmar los rumores. Mientras tanto CARY había conocido a MAE WEST una vedette algo escandalosa, aquella de “llevas pistola o te alegras de conocerme”, que era una estrella de la pantalla.
Su apoyo y el coprotagonismo en LADY LOU y NO SOY NINGÚN ÁNGEL consolidaron su fama y de ahí pasó a trabajar con GEORGE CUKOR (LA GRAN AVENTURA DE SILVIA, VIVIR PARA GOZAR o HISTORIAS DE FILADELFIA) y HOWARD HAWKS (LA FIERA DE MI NIÑA, SOLO LOS ÁNGELES TIENEN ALAS y LUNA NUEVA) y en algunas de estas películas coincidió con KATHERINE HEPBURN constituyendo una de las parejas de mayor éxito de los años 30 y 40, aunque con la actriz con la que mas veces coincidió fue IRENE DUNNE.
CARY GRANT salió de la comedia para caer en las manos de ALFRED HITCHCOCK (que le proporcionó su papel mas turbio en SOSPECHA, el mas sórdido en ENCADENADOS, el mas distinguido en ATRAPA A UN LADRÓN y el mas aventurero en CON LA MUERTE EN LOS TALONES, película en la que, por cierto, la actriz que interpretaba a su madre era mas joven que él); actuó para FRANK CAPRA que le sirvió una gran comedia en ARSÉNICO POR COMPASIÓN y volvió a trabajar con HOWARD HAWKS en LA NOVIA ERA ÉL y ME SIENTO REJUVENECER.
Al mismo tiempo apareció en películas de nuevos realizadores como RICHARD BROOKS y JOSEPH L. MANKIEWICZ y protagonizo cuatro películas de STANLEY DONEN, la mas famosa CHARADA, su última gran película. Mientras realizaba este titánico trabajo se caso cinco veces, tuvo una hija y se retiró del cine en 1.966 cuando consideró que ya estaba mayor para hacer de galán. Sin embargo siguió prestando su figura y su nombre a diferentes marcas comerciales para las que realizaba giras por ESTADOS UNIDOS.
En el transcurso de una de estas giras, cuando iba a hacer una presentación en DAVENPORT, IOWA, se sintió mal. Pocas horas después fallecía. Tenía 82 años. Dejó tras de sí algunas películas inolvidables, un estilo inimitable y un vacío en la cima de la comedia que nadie ha sido capaz de ocupar.
Félix Linares