Ha muerto Anton Yelchín. Tenía 27 años y una prometedora carrera que le estaba consagrando como estrella de Hollywood.
Hijo de un matrimonio de patinadores rusos, Yelchín nació en San Petersburgo, pero su familia se mudó a Estados Unidos 6 meses después de su nacimiento y fue allí donde él inicio su carrera como actor. Una carrera en la que se alternaron grandes proyectos y títulos de cine independiente.
Tenía sólo 9 años cuando participó en su primera película, ‘A Man is mostly water’, pero las puertas se le abrieron en 2001 cuando compartió protagonismo con Anthony Hopkins en la película ‘Corazones en la Atlantida’. Por su papel en esta película ganó el premio a la Mejor Actuación en una Película – actor joven en los premios Artista Joven 2002.
En 2007 protagonizo ‘Alpha Dog’, en la que protagonizó la historia real de Nicholas Markovitz, un joven que fue secuestrado para presionar a su hermano traficante de drogas. La madre del propio Markowitz alabó el papel de Yelchín y la crítica describió su actuación como “desgarradoramente entrañable”. Después vinieron ‘Fierce People’, ‘Charlie Bartlett’ o ‘You and I’, hasta que en 2009 J.J. Abrams se fijó en él para que interpretase a Pavel Chekov, un miembro de la tripulación del Enterprise que cautivó a la audiencia. Ese mismo año también apareció en ‘Terminator Salvation’ interpretando al joven Kyle Reese.
Volvió a interpretar a Chekov en ‘Star Trek: en la oscuridad’ (2013) y ‘Star Trek: Mas Allá’ que está pendiente de estreno.
Yelchin también era actor de doblaje, prestó su voz a Pitufo Tontin en las dos entregas de ‘Los Pitufos ‘ y estaba preparando la serie ‘Trollhunters’ de Guillermo del Toro.
Este domingo conocíamos la noticia de su fallecimiento tras un extraño accidente con su coche. Ahora, la empresa fabricante del coche del actor, Fiat Chrysler, ha informado que investigará el suceso ya que hace dos meses se hizo pública la orden de revisión de más de un millón vehículos modelo Jeep Grand Cherokee, como el que poseía Yelchin y que lo aplastó contra un muro en su casa. En esa orden se hace referencia un problema con el freno de mano, que dado su nuevo diseño podía hacer creer al conductor que el vehículo está perfectamente frenado cuando realmente no lo está. Un problema que ya habría causado 41 heridos, 212 accidentes, 308 informes de daños y que podría añadir a Anton Yelchín como su primera víctima mortal.