Archivo por meses: abril 2011

Canciones de motos

 

Esta mañana, al llegar Mungo Jerrya la emisora,  me he encontrado con una desagradable sorpresa. Alicia San Juan, mi habitual paternaire, no podía acompañarme porque a esa hora tenía que hacer no-se-qué entrevista. Una pena. Aunque mi espacio ha sido históricamente monologado (incluso yo diría que ha sido mas bien una arenga) , este año me he acostumbrado a que mis insensateces sean constantemente paliadas por los ingeniosos comentarios de Dani y Alicia. Así que , dadas la circustancias, les he pedido que entrara en su lugar Tamara, la simpática becaria gafosilla que ya me acompañara en alguna circustancia similar.

Cuando estábamos a punto de empezar, Alicia ha aparecido diciendo que la entrevista se habia “caido”, así que, con tanta gente en el estudio,  aquello parecía “Tengo una pregunta para usted”. Hoy he hablado menos que nunca porque:

A) Tamara ha salpicado mis presentaciones con su punto de vista  fresco y juvenil

B) Alicia, contenta por el cambio de planes,ha estado especialmente inspirada y…

C) Dani ha podido disfrutar de un programa más cercano a su gustos heavys que ningún otro. De hecho nos ha iluminado con una lección magistral sobre el origen de los enigmáticos cuernos de los conciertos heavylones.

Ah, se me olvidaba, hoy hemos puesto canciones de motos, y nos han puesto como una moto. brrrrum, burrrrrrummm, burrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrmmmmmmmmmmmmmmmmmm.

Canciones nocturnas

Hoy repaso algunas de las cmoris2anciones que han hablado de la noche. La noche rockera de Moris, la noche de amor de Tahures Zurdos, la noche ibicenca de Mystic y “La noche no es para mí” de Video. Sea como fuere, Rod Steward lo dejó claro: “Esta noche es la noche” (Tonight is the night) . Rod es el único al que puedo reconocer ser más hortera que yo mismo, así que me arrodillo ante el. Yihaaaahaaaa!!

Techno pop, hombreras y música de los ochenta

Hoy, precisamente hoyCASAL, se me ha ocuurrido la brillante idea de hacer un especial “Techno-Pop” de los 80. Para la ocasión he aparecido por el estudio con enormes hombreras, abrigo oscuro con lentejuelas y chorreras. Las chorreras chorreaban sudor al final de mi sesión, una sesión que ha resultado tan divertida como escatológica. Al final todo se ha solucionado con una buena ducha y un lavado de cabeza (con champú de huevo, por supuesto).