Más de cincuenta bodegas e importadores de veinte países como Reino Unido, Alemania, Japón, Estados Unidos o China participarán en la Feria Internacional de Vino Ecológico (FIVE) que, en su tercera edición, se celebrará en Pamplona el 17 y 18 de abril.
El evento está organizado por la Asociación de Empresas de Agricultura Ecológica de Navarra (AEN), que, en un comunicado, ha subrayado el momento “de gran efervescencia” que vive el vino ecológico, con España como “gran productor mundial“.
Durante estos dos días, compradores de veinte países podrán conocer vinos variados, pertenecientes a más de treinta denominaciones de origen y algunos de ellos productos de cepas infrecuentes en la viticultura, según Ignacio Bidegain, coordinador de FIVE.
Bidegain ha señalado que a pesar de la crisis generalizada, este sector está creciendo “de manera sostenible“.
De hecho, según los datos aportados por los organizadores y proporcionados por el Instituto Suizo de Investigación en Agricultura Ecológica, España es actualmente el mayor productor de vino ecológico del mundo y sólo en 2010 se dedicaron 57.000 hectáreas a la viticultura ecológica, algo más de 3.000 más que el año anterior, lo que representa el 5 por ciento de la producción total del vino español.
En 2001 España contaba con apenas 11.840,86 hectáreas de cultivo y 135 bodegas y embotelladores de vino, según datos del Ministerio de Agricultura, mientras que el pasado año se contabilizaron 456 bodegas y embotelladoras.
Desde el pasado 2007, España ha experimentado un aumento del 230 por ciento en la producción de vino ecológico, siendo Castilla-La Mancha la región más afectada por la evolución, al contar en la actualidad con 29.187 hectáreas de viña ecológica, lo que significa más de la mitad de la superficie total dedicada a este tipo de cultivo.
En cualquier caso, la AEN ha subrayado que el crecimiento y producción del sector ecológico “no pueden ser valorados bajo los parámetros de la producción industrializada” ya que el cultivo “está más bien relacionado con la calidad y el condicionamiento natural, como clima y tipo de suelo, y con la ausencia del uso de fertilizantes sintéticos“.