El pleno del Ayuntamiento de Pamplona ha rechazado hoy instar a los sindicatos convocantes de la huelga general del 29 de marzo a que se hagan cargo de los costes de recuperación y limpieza de la ciudad, en edificios, mobiliario y comercios, tras los destrozos ocasionados ese día.
No obstante, se ha aprobado una moción en la que se exige “a quienes han producido estos destrozos, que asuman su reparación”.
La petición desestimada estaba incluida en una propuesta de acuerdo presentada por UPN para que los sindicatos se hicieran responsables de los destrozos ya que, en base a la Ley Orgánica de Libertad Sindical, los convocantes no son responsables de los daños producidos, “salvo que asuman su responsabilidad expresamente”.
También ha sido rechazado otro punto de la propuesta en la que se instaba a las distintas fuerzas sindicales que convoquen huelgas en Pamplona, “a que de la misma forma que se organizan para el desarrollo de la misma, apliquen también su esfuerzo organizativo para que la ciudad recupere la normalidad”.
En cambio, han sido aprobados los dos puntos restantes, en los que el Ayuntamiento ha rechazado y condenado “enérgicamente” los destrozos y deterioros ocasionados y ha manifestado su solidaridad y apoyo a aquellos “que padecieron la violencia de los destrozos”.
La condena por los desperfectos estaba también incluida en una moción de UPN, que ha sido aprobada, en la que, junto al reconocimiento de la huelga como un derecho legítimo reconocido en la Constitución, se subraya que participantes en esta convocatoria sindical “aprovecharon esta huelga para arremeter contra todo tipo de mobiliario urbano, comercios y negocios, para ensuciar con multitud de pintadas y pegatinas, en farolas, autobuses, para romper escaparates, terrazas, maceteros”.
“En una época de crisis como la que estamos viviendo, más de 300 establecimientos sufrieron daños en Pamplona, añadidos a las pérdidas por la inactividad económica”, añade la moción, en la que también se critica que la imagen de Pamplona “se vio gravemente perjudicada”, con daños producidos en la vía pública que han sido valorados por el Ayuntamiento en 108.000 euros.
Tras exigir “a quienes han producido estos destrozos, que asuman su reparación”, en la moción se considera “inadmisible” que, de nuevo, “algunos pretendan enfrentar el derecho legítimo a la huelga con el legítimo derecho del trabajo, y que seamos los pamploneses quienes tengamos que pagar los destrozos que ocasionan”.
Finalmente se muestra el apoyo a todos aquellos comerciantes, empresarios y trabajadores en general que el día 29 de marzo “se vieron amedrentados por quienes no saben ejercer sus derechos”.