El Ayuntamiento de Pamplona aprobará próximamente una ordenanza que permitirá que las personas y familias en situación de emergencia social dispongan de una vivienda digna temporalmente mientras dura su situación de necesidad.
La ordenanza ha sido aprobada esta mañana en Junta de Gobierno Local y el miércoles será tratada en la Comisión de Urbanismo, tras lo que se abrirá un periodo de enmiendas para los grupos municipales.
En conferencia de prensa, el alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, ha señalado que “como consecuencia de la crisis económica, pero también de una equívoca política de vivienda practicada en legislaturas anteriores” se ha detectado que una de las demandas “más difíciles de resolver es la ausencia o pérdida de vivienda” por parte de personas o familias que no pueden hacer frente a su mantenimiento.
El alcalde ha destacado que estas personas se encuentran en “situaciones realmente difíciles, al borde de un desahucio, cuando no directamente en la calle”.
Respecto al parque de viviendas municipal, ha calificado de “desastrosa” la situación en la que se encontraba, ya que había en torno a 170 viviendas municipales “vacías y en un estado de abandono total” mientras que “al mismo tiempo había cientos de personas en la ciudad que necesitaban desesperadamente un vivienda digna”.
Ha precisado en este sentido que el Consistorio está trabajando para planificar un censo de viviendas municipales para conocer la cantidad de inmuebles disponibles, así como “su situación real” respecto a su rehabilitación y situación de ocupación.
Asirón ha anunciado que ya se han rehabilitado en torno a 25 viviendas y para finales de año “ya estarán en marcha”. El objetivo es “poner todas las viviendas vacías municipales a disposición de la ciudadanía”.
Por su parte, el concejal de Ciudad Habitable y Vivienda, Joxe Abaurrea, ha explicado los requisitos para poder acceder a una vivienda municipal, entre los que figura constar en el registro municipal de demandantes y presentar una solicitud con la documentación requerida.
Otro requisito es estar empadronado en Pamplona o tener residencia efectiva demostrable en la ciudad con una antigüedad de dos años y firmar un documento de compromiso respecto al buen uso de la vivienda.
Tampoco se deben superar unos ingresos en los últimos seis meses de hasta 2,2 veces el IPREM cuando la unidad familiar sea de un miembro, hasta 2,5 si son dos miembros, hasta 2,75 veces si son tres miembros, hasta 3 veces si son cuatro miembros y hasta 3,25 cuando son cinco o más.
Entre los requisitos económicos también se encuentra no disponer de patrimonio mobiliario con un valor superior a 1,5 veces la cuantía anual del IPREM.
Sobre las solicitudes, ha indicado que la valoración de las mismas se realizará de acuerdo a seis factores que son: situación de necesidad, situación económica, unidad familiar, estabilidad de ingresos, salud, y elementos de discriminación positiva.
La intención, ha comentado Abaurrea, es que a la bolsa de viviendas se incorporen viviendas de otras entidades públicas o privadas para aumentar la capacidad del programa.
Por otro lado, la concejala de Acción Social y Desarrollo Comunitario, Edurne Egunio, ha señalado que las viviendas serán arrendadas temporalmente y el precio del alquiler oscilará entre los 20 y 441 euros (los usuarios deberán abonar gastos de agua y energía).