El alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, ha considerado hoy que la propuesta del Ejecutivo foral de reducir de manera sustancial la altura de las dos torres más altas del proyecto de Salesianos confirma que “todavía hay un grado de reversibilidad”.
Así lo ha indicado a los periodistas en el Ayuntamiento de Pamplona tras conocerse la propuesta del Ejecutivo foral en la que se establece en 13 plantas la cota máxima, con lo que se equipara con los edificios ya adjudicados en la primera fase.
Para Asiron, la citada propuesta es “una noticia positiva que, además, viene de alguna manera a confirmar cuáles eran las tesis del Ayuntamiento de Pamplona”.
En ese sentido, ha explicado que la “tesis” del Consistorio era que el proyecto de torres para Salesianos “no era en sí mismo una propuesta tan buena” y “la prueba está en que en la propia subasta precisamente, la parte más débil, por así decir, ha sido la de los edificios más altos”.
“Teníamos, de alguna manera, razón”, también cuando “decíamos que las cosas se pueden cambiar y que todavía hay un grado de reversibilidad”, ha recalcado.
Para Asiron, esa propuesta confirma que “hay un grado para cambiar las cosas y quién tiene los instrumentos para poder revertir esas ideas”.
No obstante, ha considerado que la propuesta “no es suficiente” y ha señalado que “hay que evitar caer en la tentación de poner parches al tema”, por lo que ha apostado por “un replanteamiento del plan”.
En cualquier caso, ha sostenido que “la solución pasa por revertir el modelo de torres y pasarlo a un modelo de manzanas tipo del Ensanche”.
Ante el emplazamiento del Gobierno de Navarra al diálogo, ha indicado que “nuestra respuesta es positiva”, ya que “creemos que hay que hablar y que tiene que primar el sentido común”.