‘Hegoi‘, un macho adulto de águila real, ha sido radioequipado este mes de noviembre para conocer las posibles afecciones a la especie de las infraestructuras eléctricas, por lo que ya son dos los ejemplares que transmiten información por satélite en ese sentido.
Y es que ‘Hegoi’ se une a la hembra ‘Haizea’, a la que se le colocó un dispositivo de estas características en julio, por lo que desde ahora son dos los ejemplares que transmiten información por satélite sobre su área de campeo, desplazamientos y puntos de nidificación, alimentación y reposo utilizados por estos animales.
El radioseguimiento por satélite del águila real en Navarra tiene por objeto conocer el área de campeo y el uso del espacio de dos ejemplares territoriales, con el fin de comprobar el efecto que la instalación de parques eólicos y otras infraestructuras de producción y transporte de energía pueden tener sobre la especie.
Dentro de la población navarra de águilas reales, que actualmente se cifra en 48 parejas, se han elegido dos ejemplares adultos de territorios con “fuerte intervención humana”, como son la Ribera del Aragón y la Ribera tudelana.
El proyecto es fruto del convenio de colaboración suscrito hace un año entre el Gobierno de Navarra y Red Eléctrica de España (REE), entidad dedicada a la operación del sistema eléctrico y al transporte de la electricidad. REE destina a este proyecto 29.040 euros, según informa el Gobierno foral.
‘Hegoi’ tiene 2 metros de envergadura y una longitud de 80 centímetros, pesa 3,700 kilos y fue equipado con un emisor GPS/Solar de 57 gramos instalado a su espalda mediante un arnés tipo mochila. El emisor GPRS, que se recarga mediante una placa solar, facilitará diariamente localizaciones GPS a intervalos de 30 minutos.
Tras ser radio-equipado, ‘Hegoi’ fue liberado y ya está aportando información sobre el uso del espacio realizado por la pareja en su territorio de cría.
Por su parte ‘Haizea’, una hembra adulta reproductora de águila real radioequipada el pasado mes de julio, transmite que su área de campeo es superior a los 120 kilómetros cuadrados, según los datos facilitados por el dispositivo que se le colocó tras capturarla en la Ribera del río Aragón.
Nidifica habitualmente en los cortados fluviales de ese río y esta temporada ha criado un pollo, ha realizado desplazamientos diarios de más de 8 kilómetros en busca de alimento.