Vascos en el mundo

Euskadi tendrá una Delegación en Nueva York


He leído con enorme satisfacción una noticia que esperaba desde hace tiempo: “Euskadi tendrá una Delegación en Nueva York”. El Ejecutivo vasco ha explicado que, según recoge la Estrategia de Acción Exterior aprobada por el Consejo de Gobierno en el año 2005, se considera "objetivo prioritario" posicionar a Euskadi en "un lugar destacado" en el contexto internacional y dotarla de proyección internacional mediante una adecuada planificación de la acción exterior en los ámbitos institucional, económico, social y cultural.

  

Según explicó el martes la portavoz del Gobierno Vasco, Miren Azkarate, se trata de un primer paso legal, ya que todavía no hay ubicación para la sede ni se ha elegido a las personas que se encargarán de la misma.

La comunidad vasca de Nueva York, que llevaba muchos años reclamando la apertura de esta oficina, acoge con enorme ilusión la noticia. Desde 1913, la Gran Manzana cuenta con una euskal etxea aunque los vascos comenzaron a llegar a la ciudad muchos años antes.

El Gobierno Vasco ya tuvo un delegado en Nueva York: el escritor, abogado y periodista Jesús de Galíndez. La Universidad de Columbia y la Euskal Etxea neoyorquina recordaron el pasado mes de octubre con diversos actos el 50 aniversario de su secuestro y asesinato. Aquí se presentó "Guerra, exilio y frustración" elaborado a partir del libro "Galíndez: la tumba abierta", cuyo autor es Iñaki Bernardo. Esta nueva edición, en la que también ha colaborado el historiador Iñaki Goiogana, se complementa con las diferentes etapas de la política del Gobierno vasco en el exilio, que apenas se recogieron en la anterior publicación y que, fundamentalmente, abarcan los años 1939-1945, y con nuevas informaciones a partir del secuestro de Galíndez.

Entre las comunidades vascas estadounidenses ha existido siempre un pequeño debate en torno a cuál debería ser la ciudad que acogiera la delegación del Gobierno Vasco. Los vasco neoyorquinos siempre hemos mantenido que la única opción viable era Nueva York, ciudad en la que tiene su sede Naciones Unidas, desde donde el Gobierno podrá impulsar la participación de Euskadi en organismos multilaterales. Nueva York alberga además las oficinas centrales de casi todos los canales de radio y televisión de Estados Unidos así como las corresponsalías de los principales medios de comunicación del mundo. La Gran Manzana sigue siendo, al menos de momento, la capital financiera del planeta, por lo que aplaudimos la decisión tomada por el Ejecutivo vasco.

Durante la época del Gobierno Vasco en el exilio, el propio lehendakari Aguirre residió en la ciudad de Nueva York. Como cuenta Joseba Etxarri en Euskal Kultura no es este el primer intento de establecer una oficina desde la que gestionar los intereses vascos en Estados Unidos. El lehendakari José Antonio Ardanza auspició la formación de la American Basque Foundation con sede en Washington DC y una subdelegación del Gobierno Vasco en Boise, Idaho, localidad en la que se concentra el mayor número de vascos del país. Esta fórmula, tal y como apunta Etxarri en su crónica, no terminó de funcionar.

El futuro delegado o delegada, tendrá por delante una inmensa labor y es que, hoy en día, está casi todo por hacer. Desde aquí le animamos; que sepa que contará con la colaboración de aquéllos vascos o descendientes de vascos que viven en Nueva York y de otros llegados en oleadas migratorias más recientes y que acuden a ese centro fundado por gentes como Valentín Aguirre, Elías Aguirre, Juan Cruz Aguirre, Escolástico Uriona, y Toribio Altuna quienes, en 1905, se reunieron en torno a una mesa para formar lo que en 1913 se denominó -por un error de su abogado Fiorello Laguardia, quien después llegaría a ser alcalde de la ciudad- Central Vasco-Americano Sociedad de Beneficencia y Recreo, convirtiéndose así en la primera casa vasca de Estados Unidos.

En la foto, la puerta de entrada a la Euskal Etxea de Nueva York.