Arte | Cuadros, esculturas, pinturas y autores

” Se fué muriendo lentamente” es la frase que uno de sus mejores amigos, Andrés Henestrosa confesó una vez conocido el estado físico de Frida Kahlo. A partir del año 1925 la vida de la Mejicana sufrió una fulgurante decadencia física, padeciendo dolores en su espalda y en su pierna derecha. Tras el accidente tuvo que aprender a mantenerse quieta e inmóvil en la cama para poder recuperarse de la mejor manera posible. Casi por casualidad comenzó a dedicarse a la ocupación que transformaría su vida, la pintura. 

Cuando Aejandro volvió en noviembre de su viaje europeo, no había olvidado del todo a Frida. La mantuvo siempre presentre en su pensamineto, pero ya nada era igual; aquella ferviente intensidad había disminuido y poco a poco se fueron alejando el uno del otro, sumergiendose él en actividades universitarias y en la pintura ella.

Aunque haciéndose a la idea de que la relación con su adorado Alex estaba finalizada, ella seguía inmersa en su pintura, de hecho jamás representó su accidente en ninguna de sus pinturas, pero si fue éste y sobre todo las secuelas, las que la llevaron a manifestar su estado de ánimo.

“Me retrato a mi misma porque paso mucho tiempo sola y porque soy el motivo que mejor conozco”, así arrancaría la infrenable carrera de una de las mejores artistas Mejicanas del siglo XX, pero algo estaba aún por suceder: alguien haría acto de presencia en la vida de la mismísima Frida Kahlo… ( Continuará )
BIOFRAFÍA DE FRIDA KAHLO POR IKER LANDETA

 ( Vídeo Frida Kahlo )