El viernes asistimos a la nueva sesión de “Art After dark” en el Guggenheim a ver el tándem formado por Bimba Bosé y David Delfín o lo que es lo mismo, Michelle y Romy DJs. Tenemos que confesar que acudíamos llenos de escepticismo entorno a las habilidades de la pareja en estos menesteres.
No nos sorprendimos al llegar y ver que ¡el Guggen estaba lleno!…Ni la mismísima Alaska, muy querida por estos lares, había conseguido llenar el museo de esa manera. Nos preguntábamos con cierta sorna, si era la escasa programación bilbaína, las ganas de ver y dejarse ver o la misma curiosidad morbosa que sentíamos nosotros lo que había movido a la gente a acercarse aquella noche a ver a la pareja.
Sin embargo, ¡cual fue nuestra sorpresa al comprobar que la pareja no tardó nada en ponernos a todos a bailar!. Fueron cercanos, divertidos y carismáticos. Bimba particularmente, que además, hay que decir que al natural es arrolladora y espectacularmente guapa.
Es cierto que de técnica como Djs nada de nada. Sería más apropiado hablar de ellos como pinchadiscos pero los angelitos nos hicieron entrar en calor en el Guggen y nos sacaron chispas en Fever…No sólo consiguieron que no paráramos de bailar sino que además llenaron el ambiente de buen humor y buen rollo. Para los que no estuvisteis…¡os perdisteis una gran noche!.
Bailad, bailad malditos!
Miss&misterAA para Demode.
