Cinco años de cárcel por intentar matar a su primo con unas flechas
Un vecino de San Sebastián ha aceptado hoy una pena de cinco años de cárcel por intentar matar a su primo, con el que mantenÃa “una relación muy conflictiva”, al dispararle varias flechas con un arco “apto para la caza mayor”.
Estos hechos, ocurridos en la tarde del 31 de diciembre de 2013, iban a ser juzgados hoy en la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa, aunque la vista no ha llegado a celebrarse porque a su inicio la defensa y las acusaciones han llegado a una conformidad sobre las penas que deben imponerse al acusado.
Las partes han acordado rebajar hasta cinco años las peticiones iniciales de condena, que eran de siete años de prisión en el caso del fiscal y de nueve años y medio en el de la acusación particular, ejercida por la vÃctima, un hombre de 80 años.
Para ello se ha considerado la atenuante de embriaguez, ya que el acusado, de 53 años y actualmente en prisión provisional, padecÃa el dÃa del suceso una “intoxicación etÃlica leve”.
En dÃa de los hechos se habÃa producido un incidente entre ambos, motivo por el cual una patrulla de la Ertzaintza se habÃa desplazado al domicilio de la vÃctima, situado en el barrio de Trintxerpe, donde los dos convivÃan.
Una vez solucionado el problema suscitado entre los primos y cuando la vÃctima se encontraba en el portal hablando con los agentes, el procesado salió de la vivienda sin que ninguno de ellos lo advirtiera con un arco de gran tamaño.
Tras cargar una flecha y “con ánimo de causar la muerte de su primo”, el procesado apuntó y le disparó desde la escalera, que se hallaba “muy oscura”.
La flecha no llegó a alcanzarle porque uno de los agentes se percató de lo ocurrido y pudo apartar a la vÃctima de la trayectoria, aunque pasó a “escasa distancia” de su cuerpo.
El imputado intentó cargar en el arco una segunda flecha, de punta de hierro y aristas muy afiladas, pero no lo logró porque pudo ser reducido por los ertzainas, a quienes el presunto homicida dijo “repetidamente” que querÃa matar a su primo y “acabar con el problema”.
El procesado padece una dependencia del alcohol, “sin otra patologÃa psiquiátrica asociada”.
Además de la pena de cárcel como autor de un delito de tentativa de homicidio, el procesado no podrá acercarse a la vÃctima ni tener comunicación con ella por un periodo de ocho años y se le prohibirá el derecho a la tenencia y porte de armas durante el tiempo de la condena.
El acusado contaba con antecedentes penales “no valorables” para esta causa. La última condena que le fue impuesta está fechada en febrero de 2013 por un delito contra la seguridad vial.