Todos los días, a las 12:00 horas de la mañana, se escucha una sirena bélica en el centro de Donostia. Una persona que, habiendo conocido un país en guerra, se encontrara paseando al mediodía por cualquier calle del centro de la ciudad se asustaría, pero un donostiarra no.
Y es que a pesar de que se escucha prácticamente desde cualquier punto de la ciudad, es en esta zona en donde mejor se puede oír una sirena similar a las que anuncian un toque de queda o un aviso de bombardeo inminente. Nada más lejos de la realidad.
Su origen tiene más miga de lo que se comenta en la calle: A finales del siglo XIX existía un cañón en Plaza Gipuzkoa que se prendía a las 12:00 horas porque el sol de esa hora se alineaba con una lupa que apuntaba a la mecha.
Tras el desarme del cañón en 1930, el periódico El Pueblo Vasco recuperó la costumbre colocando una sirena en su oficina de la calle Garibai. En 1936 el periódico cerró la oficina y se trasladó allí la Relojería Internacional que sigue haciendo funcionar la sirena.
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Me resulta muy familiar.
Gracias.... Siempe pensé que era por el Angelus!
Este hecho fue motivo para mi en relatar en el taller de comunicacion y creativadad al q acudo. Este esperpentoso sonido ha hecho q mi hipocampo estallara desplazandome a décadas pasadas. Al día d hoy no se cual es la finalidad deq ésto ocurra.
sencillamente es una tradición. Lo explica muy bien arriba.
Hombre,como indicador horario no está mal.Es que lo del cañoncito del padre Orcolaga no funcionaba casi nunca.A quien se le ocurre?Pues a él Orcolaga,pobrecito...