Cuando Elizabeth Taylor falleció el pasado mes de marzo y se dio a conocer el contenido de su testamento se supo que su herencia se repartiría entre sus hijos pero que una parte, la que comprendían sus joyas, sería destinada a causas benéficas.
La fecha de la subasta, a cargo de la casa Christie´s, estaba fechada para esta pasada semana e incluia la venta de vestidos, objetos y joyas pertenecientes a la actriz, entre ellas la conocida Perla “Peregrina” que le regaló el que fue el amor de su vida: Richard Burton.
La “Peregrina”, encontrada en el siglo XVI por un esclavo panameño que ganó su libertad perteneció a la corona española y fue lucida sucesivamente por reinas de España y Austria que reflejó Velázquez en sus retratos, fue comprada por Burton en una subasta por 39.000 dólares y estaba tasada entre los 2 y los 3 millones de dólares por Christie´s aunque finalmente fue vendida por 11’8 millones.
Otro de los tesoros de la colección de Elizabeth Taylor, declarada amante de las joyas, era el Taj Mahal, un rubí y collar de oro, que Burton le regaló cuando cumplió 40 años. Esta joya se vendió por 8’8 millones de dólares y batió un récord para una joya india.
A lo largo de los cuatro días que ha durado la subasta, la venta de joyas, vestuario u objetos de la actriz, entre los que se encontraban los guiones originales de ‘La gata sobre el tejado de zinc caliente’ o ‘Fuego de juventud’, ha superado los 150 millones de dólares se destinarán, como Taylor quería, a causas benéficas.