X

Historia del Barrio de San Juan de la Cadena, de Pamplona

Vamos a conocer datos sobre el barrio de San Juan de la Cadena, de Pamplona/Iruña. Lo haremos, al igual que en otras ocasiones, de la mano de José María Jimeno Jurío y Patxi Salaberri Zaratiegi, autores del libro “Toponimia de la Cuenca de Pamplona” (Euskaltzaindia, 1994), con el que nos documentamos para escribir el texto que comienza a continuación. Con él, vamos a despedir hasta el mes de septiembre esta serie de artículos relacionados con la historia de Pamplona, muy satisfechos de la acogida que habéis ofrecido a nuestro trabajo y con el empeño de continuar, una vez recargadas las pilas, con el inicio del nuevo curso.

Hoy hemos elegido la zona de San Juan de la Cadena, casi sobra decirlo, porque mañana celebraremos la festividad de San Juan y a partir de esta tarde serán multitud las hogueras que se enciendan en muchos puntos de Pamplona. Al tratarse de un rincón que lleva en su nombre el del santo cuyo día festejamos, nos ha parecido un lugar muy adecuado para darnos, en un día como hoy, una vuelta. Si nos acompañáis, vamos allá.

Colegio San Juan de la Cadena de Pamplona. Foto del propio colegio.

Tal y como explican Jimeno y Salaberri, el barrio de San Juan tiene su origen en la llamada “domus Confrarie de Baraniain“. Los propietarios de las viviendas de San Juan, leemos en el libro que hemos consultado nosotros, “eran personas de cierto rango económico y social“, y las alquilaban a labradores, pastores y artesanos de posición más humilde. Por esto “y por la presencia los corrales del Municipio y del Hospital“, San Juan era un barrio con marcado sello popular.

Cuando el siglo XVI tocaba a su fin, hace más de 400 años, varios “caseros” procedentes de Iparralde, de Behenafarroa, ocupaban algunas de las casas del barrio de San Juan, entre las que se encontraban “el Mesón” y la llamada “casa de la Argolla“. Desde luego, se trataba de un barrio que lo tenía todo: había basílica, una corraliza y un total de diez casas, en 1786, “habitadas por catorce familias”.

En 1795, en plena guerra (entre 1793 y 1795 tuvo lugar la llamada Guerra de la Convención, entre España y el país galo), el barrio fue demolido; su cercanía a las murallas de Pamplona y a la Ciudadela le convertían en un lugar poco seguro. Pero eso no fue el final definitivo, ya que años después se comenzaron a levantar nuevas casas, “sobre todo, en torno a los caminos de Barañáin y Estella“, apuntan José María Jimeno y Patxi Salaberri. La plaza de San Juan de la Cadena, que se encuentra en el lugar, es testigo mudo de la historia de esta zona de Iruña.

Pues nada, ya sabéis… Hoy, en San Juan de la Cadena, o donde queráis, a lanzar al fuego todo lo malo. ¡Y a disfrutar del verano! ¡Un saludo a tod@s, y muchas gracias!

Jesus Elordui:
Related Post