El Pleno del Ayuntamiento de Pamplona ha aprobado una declaración institucional con motivo de la celebración el próximo 8 de marzo del Día Internacional de la Mujer en la que se compromete a trabajar por la igualdad y muestra su apoyo al feminismo.
Bajo el título “El feminismo no es lo contrario al machismo, sino el mejor antídoto contra la desigualdad. Ahora, ¡más necesario que nunca!”, el texto señala que son “indiscutibles los logros alcanzados por las mujeres en el ejercicio de su ciudadanía” pero constata también un “rearme ideológico del machismo” en los últimos años.
“Los llamados neomachismos constituyen el fortalecimiento de una serie de discursos machistas, que relativizan y avalan de forma explícita o sutil las desigualdades de género y la violencia hacia las mujeres y las sexualidades no normativas. Y utilizan la violencia sexual hacia las mujeres para impulsar políticas racistas e islamófobas, bajo una falsa apariencia de defensa de los derechos de las mujeres”, sostiene el texto.
Y añade que “en la actualidad vivimos el espejismo de la igualdad, es decir, hay una sensación generalizada de que ya se ha alcanzado la igualdad entre mujeres y hombres, pero nada más lejos de la realidad”.
Como ejemplos la declaración cita la brecha salarial, el techo de cristal por el que las mujeres se encargan mayoritariamente de las tareas domésticas y cuidados, los asesinatos a manos de parejas o exparejas, y la violencia sexual.
“El ideal romántico sigue estando en la base de las relaciones de maltrato y abuso, sobre todo entre la población más joven”, agrega el texto, que pone en valor la labor y el esfuerzo de los movimientos feministas.
En este sentido asegura que “ahora que el machismo es más sutil y más difícil de detectar” lo que hace al feminismo “más necesario que nunca” pues “solo así podremos superar las desigualdades entre mujeres y hombres y caminar hacia una sociedad donde todas las personas tengan los mismos derechos, deberes y oportunidades”.
La declaración, que denuncia una sociedad todavía “patriarcal, que discrimina a las mujeres, que las invisibiliza y violenta”, reconoce el ejemplo de Wangari Maathai, Premio Nobel de la Paz en 2004, y asegura el compromiso del Ayuntamiento de Pamplona para “garantizar la incorporación del principio de igualdad en todas las políticas públicas”.