Se pide que nos hagan filetes de los gallos.
Se salpimentan los filetes y se pasan por harina.
En una sartén se pone una cucharada de mantequilla y otra de aceite a calentar fuerte. Se fríen los filetes y se ponen en una cazuela.
En la sartén en la que se han frito los filetes se añade un poco más de mantequilla y una cucharadita (de café) de harina y una pizca de sal. Se fríe, se riega con el zumo de limón y se remueve bien hasta que quede bien ligada.
Si la salsa quedara espesa se puede rebajar con un poco de fumet o agua.
Se echa la salsa a los filetes y se les da un pequeño calentón para servir.
- 2 gallos de unos 500 g.
- ½ limón (el zumo)
- Aceite, mantequilla, harina, sal y pimienta