Disco de la semana: TIGA : CIAO! by Korova

Tiga es un DJ y productor canadiense que figura en la lista VIP de todos
los clubes del planeta gracias a su espectacular primer disco largo
(Sexor, 2006), un trabajo que salió tan rentable como para permitirse
vivir de las rentas durante 3 años, firmando remezclas y sesiones como
quien firma autógrafos. Ahora Tiga se ha vuelto a meter en un estudio para
dar forma a la continuación de aquel, y lo que le ha salido es este Ciao!
que tenemos entre nuestras manos pecadoras.

Los segundos discos es lo que tienen: no puedes evitar escucharlos sin
compararlos con los anteriores, y hay una regla no escrita que dice que
las más de las veces salen perdiendo. Vale, pues eso es lo que pasa con
Ciao!, un disco apañao pero irregular con el que Tiga va a tenerlo difícil
para reverdecer los laureles sobre los que se durmió todo este tiempo.
Para empezar, por culpa de la portada: si la de Sexor era un homenaje a
Bryan Ferry, la de Ciao! parece un guiño a Locomia, y eso acojona un poco.
Y en cuanto al contenido, la verdad es que Ciao! es lo más parecido a una
montaña rusa; Beep Beep Beep suena como una remezcla de la sintonía de
Corrupción en Miami de Jan Hammer, Mind Dimension se suelta la melena por
el lado acid de la vida (ese irritante TB303, ese molesto vocoder) y sólo
Shoes comienza a parecerse algo al malicioso pop electrónico de hits como
Hot in Here o You gonna want Me, aunque de lejos. Si el arranque no es muy
alentador, el resto intenta corregirlo: en What You need, Tiga emula a
Justice con un acierto notable y en Luxury se embarca en una luminosa
aventura de synth-pop ochentero llena de neones, mientras que Sex O’Clock
no pasa de correcta. En la recta final del disco, Overtime demuestra que
si el andamiaje instrumental es impecable, a Tiga le falla la puntería a
la hora de insuflarle vida, y Turn the Night on se vuelve a apoyar en la
nueva ola (¿soy el único freak al que le recuerda a grupos como B-Movie?),
al igual que la más pop Speak, Memory. Para terminar, Tiga se deja ir con
un medio tiempo electrificado en Gentle Giant, y Love don’t dance here
anymore añade nubes de brillantina y destellos de bola de espejo, que es
lo que vinimos a buscar.

En conclusión:  Ciao! es un disco simplemente aceptable de electro con
brillos y zonas oscuras…Tiga no ha logrado incrustar los hits que se
esperan de él, aunque el sonido sea perfecto y hacerle hueco en una sesión
de DJ no va a costar demasiado. Cuando los remezcladores le hinquen el
colmillo (Mr. Oizo ya está en ello), es posible que hasta un single tan
tontaina como Shoes reluzca, y con eso bastará para que Tiga vuelva a
entrar en tu club preferido pasando por delante de ti y sin cambiarse de
zapatillas.

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