Las obras de construcción de la Variante de Ermua se iniciarán el próximo verano, con la previsión de que concluyan en 2017, y tendrán un presupuesto de 89,35 millones de euros, ha anunciado hoy la diputada foral de Obras Públicas y Transportes de Bizkaia, Itziar Garamendi.
La construcción de esta carretera es una antigua reivindicación de los vecinos y del Ayuntamiento de Ermua, gobernado por el PSE-EE, y forma parte de los acuerdos por los cuales los socialistas posibilitaron la aprobación de los presupuestos de la Diputación vizcaína, gobernada por el PNV, para el presente año.
En rueda de prensa, Garamendi ha informado de que el consejo de administración de la empresa foral Interbiak, encargada de la gestión de las carreteras vizcaínas, aprobó ayer, lunes, las licitaciones para construir la Variante de Ermua, proyectada para descongestionar el tráfico en la N-634 a su paso por esta localidad vizcaína.
La diputada ha concretado que, para cuando la variante se ponga en servicio en 2017, las previsiones apuntan a un tráfico por la nueva carretera de entre 9.000 y 12.000 vehículos al día, una cifra “importante” que dejará de atravesar Ermua por la N-634.
Ha explicado que, dadas las diferencias técnicas de los dos tramos que compondrán la variante, uno en túnel y otro a cielo abierto, se han establecidos dos licitaciones: uno para la zona de Uretamendi, con un plazo de ejecución de 26 meses, y otra para Beko Erreka, con 32 meses de plazo para su construcción.
Las obras, que obligarán a mover un millón de metros cúbicos de tierra, contemplan la ejecución de un túnel y 11 estructuras principales, entre ellas seis viaductos y un paso inferior para el ferrocarril.
Garamendi ha indicado que el plazo de presentación de ofertas para la construcción de la variante concluirá el próximo 11 de abril, por lo que las máquinas comenzarán las obras en verano.
La Variante de Ermua tendrá un recorrido de poco más de 4 kilómetros y conllevará un nuevo enlace con la autopista AP-8, así como la sustitución de las actuales cabinas de peaje.
La nueva carretera comenzará en Ermua, en la N-634 procedente de Areitio, con la ejecución de una nueva glorieta.
Cruzará el monte Ureta a través de un túnel y discurrirá a cielo abierto por la vaguada del arroyo Beko, ya en el municipio de Zaldibar, en paralelo a la autopista AP-8, hasta conectar con la rotonda de San Lorenzo, que forma parte de la variante del municipio de Eibar.
Para salvar el monte Ureta será necesario construir un túnel con dos tubos, uno en cada sentido, con una longitud de 589 metros cada uno, lo que supone una excavación en mina de un total de 1.178 metros.
De las 11 estructuras principales proyectadas, las más importantes son tres viaductos para el enlace con la autopista que suman 336 metros; un paso inferior de ferrocarril de 86 metros en la rotonda de Uretamendi, y los viaductos de Eitzaga, Oterre y Canal, de 343 metros en total.