Un problema muy común que aqueja a muchas personas son los nudos, mejor conocidos por nosotros los fisioterapeutas como contracturas musculares. Los nudos o contracturas musculares provocan mucho dolor, limitaciones funcionales y muchos otros problemas secundarios o asociados, por lo que los fisioterapeutas los abordamos día a día en nuestras consultas. Muchas veces los nudos o contracturas se hacen difíciles de tratar o son recurrentes, por lo que hay que tener claro qué y cómo abordarlos. En este post te hablaremos de los nudos o contracturas y de todo lo que necesitas saber acerca de su origen, el mecanismo a través del cual se producen, el por qué se originan, qué otros síntomas producen y cómo tratarlas.

Nudo o contractura muscular: ¿De qué se trata?

El nudo o contractura muscular es aquella contracción involuntaria de fibras musculares. La contracción involuntaria es exagerada y mantenida, por lo que al palpar la superficie de la piel donde se ha presentado la contracción se siente efectivamente un nudo.

El tamaño de un nudo o contractura muscular puede variar y depende del número de fibras musculares implicadas en la contracción involuntaria.

Mecanismo de producción de un nudo o contractura muscular

Hay distintas formas en las que se produce un nudo o contractura; pero antes de comprender cómo se produce debemos entender cómo funciona un músculo: el músculo siempre tiene un nivel de tensión, al que llamamos tono muscular. Este tono es el que permite que mantengamos nuestra postura y se produzca el movimiento.

Cuando el tono muscular aumenta y se prolonga en el tiempo disminuyen 2 cosas: primero, la capacidad o rango de movimiento del músculo (porque el arco de movimiento se va acortando a medida que aumenta la tensión en el músculo) y segundo, la circulación de los tejidos del propio músculo (los líquidos se movilizan gracias a las contracciones; por lo tanto, una contracción prolongada no moviliza los líquidos y se produce un estancamiento). Con ello, las toxinas o desechos provenientes de los procesos celulares del propio músculo se acumulan y al no eliminarse irritan las terminaciones nerviosas libres provocando dolor. Un hecho curioso es que, al producirse dolor, la respuesta inmediata es producir más tensión, para proteger o defender el área afectada. Con el aumento de la tensión volvemos al principio y se crea un círculo vicioso: tensión provoca dolor y dolor provoca tensión.

¿Por qué se producen los nudos o contracturas musculares? ¿Por qué son tan frecuentes?

Entre las causas por las que se originan las contracturas musculares encontramos las siguientes:

Tensiones de origen psíquico

Las emociones provocan en nuestro cerebro la segregación de diversos neurotransmisores. Estos neurotransmisores viajan a través del torrente sanguíneo para cumplir diferentes funciones (como aumentar los latidos del corazón, disminuir la frecuencia respiratoria, aumentar la tasa de filtrado de los riñones, relajar esfínteres, etc.) y entre ellas puede estar el aumento del tono muscular. Si la emoción se mantiene, también lo hará la producción del neurotransmisor y por ende se produce un trastorno del tono muscular, con lo que se inicia el mecanismo de producción de la contractura.

Auto intoxicaciones

La ingestión de alimentos que no son sanos para nuestro organismo (por ejemplo el alcohol o la comida chatarra) produce más sustancias de desecho de las que el cuerpo puede manejar y se comienzan a almacenar en los músculos. El almacenamiento de estas sustancias provoca la irritación de terminaciones nerviosas libres, esto último provoca dolor, el dolor aumenta el tono y así hasta producirse el nudo o contractura muscular.

Fatiga muscular

Cuando realizamos un esfuerzo mayor del que realmente podemos o cuando realizamos esfuerzos prolongados las fibras del músculo se fatigan y pierden la capacidad de relajarse. Cuando las fibras musculares no se relajan aumenta el tono, y con ello de nuevo se inicia el ciclo de producción del nudo o contractura muscular.

Reflejos viscerales

Una víscera que no funciona bien es capaz de, a través del sistema nervioso, afectar determinados niveles de la columna vertebral, bloqueando sus movimientos propios hacia un determinado lado. Cuando 2 vértebras se bloquean inmediatamente el nervio que sale de entre ellas se pinza y se ve alterado el tono muscular de los músculos que son inervados por el nervio. De nuevo, se inicia el mecanismo de producción del nudo o contractura muscular.

Microrroturas producto del deporte

Los traumatismos repetitivos producidos por el deporte no dan espacio al organismo a que pueda encargarse de los desechos tóxicos de los procesos celulares (que, por si fuera poco, aumentan mucho más de lo normal cuando se practica deporte). Tal y como sucede en las auto intoxicaciones, el acúmulo de sustancias tóxicas produce irritación de terminaciones nerviosas libres, lo que dispara el dolor y en seguida dispara a su vez el mecanismo en el que se producen los nudos o contracturas musculares.

Y existen muchos más mecanismos a través de los cuales se originan los nudos o contracturas. El mecanismo siempre será el mismo, pero iniciará en diferentes momentos según la causa.

¿Qué síntomas se pueden producir un nudo o contractura muscular?

El mantenimiento de un nudo o contractura muscular puede producir síntomas secundarios, esto determinado por la zona en la que se produce el mismo. Por ejemplo:

• Dolor irradiado hacia otras zonas.
• Una cefalea, mareo o vértigo se pueden producir de un nudo o contractura muscular en el cuello (la contractura del músculo disminuye a su vez el flujo sanguíneo de lar arterias del cuello, las cuales proveen sangre a distintas estructuras de la cabeza y oído interno).
• Sensación de hormigueo o alteraciones de la sensibilidad (la contractura del músculo puede producir el pinzamiento de un nervio; e incluso producir síntomas graves como pérdida de movimiento, como sucede durante un síndrome del piramidal).

¿Cómo tratar un nudo o contractura muscular?

Existen miles de tratamientos distintos para los nudos o contracturas: crioterapia, termoterapia, corrientes eléctricas, masaje, vendajes, terapia manual, osteopatía,… Pero a pesar de la diversidad es fundamental para el tratamiento de un nudo o contractura muscular el hallazgo de la causa que lo provoca. Ninguna técnica es efectiva si no se trata la causa directa; si el nudo o contractura muscular es provocado por fatiga muscular, la aplicación de algún tipo de corriente eléctrica como TENS o con masaje y reposo cederá. En cambio, si el problema es por ejemplo una auto intoxicación o tensiones psíquicas, el nudo no cederá ni con corrientes, ni con masaje, ni con terapia manual hasta que se cambie la alimentación o se analice el por qué la tensión emocional y se trabaje.