El próximo 17 de noviembre será el quinto aniversario del fallecimiento del jugador Ramses Juravle. Quizá los más jóvenes no lo conozcan, pero este zurdo paseó su particular ‘Tomahawk’ por todas las piscinas de España con los clubes maños. Tras ser diagnosticado con un tumor cerebral en 2007, tuvo que dejar el waterpolo no sin antes despedirse con un gol con su amado CN Helios para colgar el bañador definitivamente. Su muerte, fue muy sentida por todo el estamento y aquà nuestro particular homenaje.
Internacional con la selección cubana en 30 ocasiones, aterrizó en 2001 en Zaragoza con cierta polémica previa. Tanto es asà que el propio Marcelino Iglesias –entonces a cargo del gobierno aragonés- tuvo que echar mano del teléfono para agilizar los trámites que le retenÃan en su paÃs de adopción. Aquellos dÃas Ramses entrenaba “inquieto†con su antiguo equipo el Dinamo de Bukarest. Finalmente, el jugador rumano aterrizó en Zaragoza y durante los años que estuvo en activo pasó por la mayor parte de los equipos maños. Entre ellos el Plaza, El Olivar y CN Helios con quien jugó su último partido.
Además de ser 30 veces convocado con Cuba, jugó más de 150 partidos con RumanÃa y disputó el Mundial de Barcelona 2003 y los europeos Kranj (Eslovenia) y Budapest (HungrÃa). En su brazo izquierdo atesoraba un tremendo disparo que hacÃa que cada vez que Ramses tuviese el balón, los arqueros estuviesen en alerta máxima.
Los que tuvieron la suerte de conocerle siempre destacaron que te recibÃa con una sonrisa y que se dejaba querer mucho por los más pequeños. “Era una pieza fundamental dentro del equipo, muy exigente. Su experiencia nos ayudó a todos y su profesionalidad fue intachableâ€, decÃa de él su compañero Nacho Fernández.