¿Cuál es el mejor tratamiento para la tendinitis de los peroneos?

Los músculos peroneos representan una gran importancia para la funcionalidad del tobillo, puesto que le permite flexionar y rotar. Pero su uso excesivo debido a las actividades deportivas y repetitivas ocasiona que sus tendones se inflamen y desencadenen un cuadro clínico doloroso. En este artículo te explicaremos todo sobre la tendinitis peronea y cómo mejorar la sintomatología a través de un tratamiento fisioterapéutico en Logroño.

¿Qué es la tendinitis de los peroneos?

La tendinitis de los peroneos es una inflamación de los tendones peroneos, desencadenada a menudo con el exceso de uso, en actividades de agilidad (como el tenis, baloncesto, voleibol y fútbol, pero sobre todo en los corredores) que ponen un estrés significativo sobre los tendones.

La tendinitis del peroné es común en atletas y especialmente corredores, ya que tienen más probabilidad de doblar el pie hacia afuera, causando fricción entre el tendón y el hueso.

Tipos de tendinitis peronea

La tendinitis del peroneo puede ser aguda, lo que significa que aparece repentinamente, o puede ser crónica, lo que significa que se desarrolla con el tiempo.

Importancia de los tendones peroneos

Existen dos tendones peroneos, el peroneo largo y el peroneo corto.  Están ubicados uno al lado del otro a lo largo del hueso inferior de la pierna (peroné o fíbula) y detrás del bulto óseo del lado exterior del tobillo llamado maléolo lateral.

Un tendón del peroneo corto conecta el exterior del pie a la base del dedo meñique del pie (quinto metatarso). El largo va debajo del pie y se conecta al interior del arco.

Los tendones del peroneo se encuentran en el pie, conectando el músculo al hueso.

Ayudan a soportar el peso y mantener la estabilidad …

Estos tendones son importantes, ya que proporcionan estabilidad al tobillo cuando soporta peso y lo protegen de esguinces. También ayudan a girar el pie hacia abajo y lateralmente, además estabilizan el arco al caminar.

¿Cómo se produce la tendinitis peronea?

Esto sucede cuando hay una carga aumentada y exceso de uso de los tendones, lo que hace que friccione con el hueso. Esta fricción hace que los tendones se inflamen y produzcan todo el cuadro clínico.

Lo que ocurre es que el sobreuso provoca la inflamación de la vaina tendinosa y se generan cambios degenerativos en el tendón.

¿Cuáles son las causas de la tendinitis peronea?

  • Uso excesivo.
  • Aumento repentino en el entrenamiento, particularmente en actividades en las que se lleva peso, como caminar, correr y saltar.
  • Técnicas inadecuadas de entrenamiento.
  • Calzado inadecuado o sin soporte.

Factores de riesgo de la tendinitis peronea

  • Alteraciones estructurales del pie (arcos del pie más altos).
  • Problemas musculares y articulares de las extremidades inferiores.
  • Desequilibrios musculares de las extremidades inferiores.
  • Lesiones previas en el tobillo como un esguince, que aumenta la probabilidad de desarrollar tendinitis del peroneo.

Síntomas de la tendinitis peronea

  • Dolor en la parte posterior del tobillo.
  • El dolor empeora durante la actividad y se alivia al descansar.
  • Dolor cuando se gira el pie hacia adentro y afuera.
  • Inflamación en la parte posterior del tobillo.
  • Inestabilidad del tobillo.

¿Qué tan grave puede ser la tendinitis peronea?

Con el tiempo, si no se trata la tendinitis los tendones dañados aumentan el tamaño a medida que el tejido cicatrizal intenta reparar el área dañada. Esto debilita los tendones y los hace más propensos al desgarre. A su vez, esto puede aumentar la posibilidad de un tobillo torcido o daño a un nervio. Por eso es extremadamente importante tratarlo tan pronto como sea posible y seguir un programa de recuperación.

Diagnóstico fisioterapéutico

Para empezar, se realiza una valoración subjetiva para recolectar la mayor información posible sobre cómo se desencadenaron los síntomas y cuál ha sido su comportamiento. Luego se realiza una exploración física, en donde se usarán varias pruebas diagnósticas de movilidad, fuerza y sensibilidad.

Los ultrasonidos o los estudios de imágenes por resonancia magnética también podrían usarse para identificar inflamación anormal o un tejido cicatrizal y para ayudar con el diagnóstico.

Tendinitis de los peroneos en el tobillo – Automasaje para su tratamiento

El objetivo del tratamiento conservador de la tendinopatía es promover la regeneración frente a la reparación del tejido tendinoso.

Tratamiento fisioterapéutico de la tendinitis peronea

Inicialmente se recomienda el cese de las actividades deportivas, o cualquier otra actividad que pueda agravar la lesión hasta que el dolor haya desaparecido. El área necesita tiempo para recuperarse.

El estándar para el tratamiento de la tendinopatía es la movilización y la carga mecánica mediante ejercicio…

Durante la primera fase, dependiendo de la gravedad de los síntomas, se recomienda reposo, inmovilización, deambulación protectora mediante muletas o tratamiento ortopodológico. De ser necesaria la inmovilización, ésta debe mantenerse el menor tiempo posible, ya que un periodo prolongado de inmovilización tendrá efectos adversos sobre el tendón, reduciendo su fuerza tensil, como consecuencia de la pérdida de parte del contenido de agua y proteoglicanos del tendón.

La primera fase

  • Tiene como objetivo la disminución del dolor a un nivel tolerable, que posibilite el inicio de los ejercicios de carga mecánica. Por ello, las medidas a aplicar serán puramente sintomáticas, para permitir el paso lo más rápidamente posible a la segunda fase del tratamiento.
  • Se emplearán agentes físicos terapéuticos con el fin de aliviar el dolor y desinflamar (Ondas de choque, magnetoterapia, Ultrasonido y crioterapia).

La segunda fase

  • Consiste en el fortalecimiento y la tonificación de los músculos peroneos, para promover su regeneración frente a su reparación.
  • Ejercicios excéntricos, ya que estos provocan una mayor carga sobre el tendón a diferencia del ejercicio concéntrico, estos ayudan a controlar el dolor y a normalizar la estructura del tendón.
  • Estiramientos de los músculos peroneos, esto favorece un incremento en la síntesis de colágeno y mejora la alineación de las fibras, aumentando la fuerza tensil del tendón.

Recomendaciones para prevenir la aparición de la tendinitis peronea

  • Usar zapatos apropiados que soporten adecuadamente el pie y el tobillo.
  • Elongar la pantorrilla y los músculos del peroneo, luego del entrenamiento.
  • Aumentar el entrenamiento gradualmente y no de manera explosiva.

Las personas que experimentan tendinitis del peroné usualmente se recuperan por completo, pero toma su tiempo. Es esencial no apresurarse para retomar las actividades.

Las lesiones agudas se recuperan más rápido que las lesiones crónicas, pero en ambos casos, la rehabilitación es determinante. Es importante que las personas completen su programa individual de recuperación para reducir el riesgo de repetir la lesión y para que puedan nuevamente recuperar la funcionalidad del pie.

 

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