El Athletic Club deberá centrarse en las próximas jornadas en defender la posición de Liga Europa que ocupa tras la vigésimo quinta jornada de Liga después de tres derrotas seguidas que le han dejado casi imposible el sueño que llegó a albergar de poder alcanzar la Liga de Campeones.
Especialmente doloroso le ha resultado al equipo bilbaÃno el partido que ha perdido en la última jornada en San Mamés ante el Valencia, ya que en él pretendÃa reengancharse a la ilusión de meterse en el torneo continental más importante imponiéndose a uno de los rivales que le anteceden en la tabla.
Pero, el gran partido que completó, fundamentalmente durante la primera hora, no le dio para superar a un Valencia que se mostró muy poderoso con la posesión del balón y cuando al conjunto rojiblanco empezaron a abandonarle las fuerza en el tramo final del choque.
Fue una derrota más que digna la que sufrió el Athletic frente al tercer clasificado, como también lo fue una semana antes ante el estratosférico lÃder Barcelona, pero ambas se han sumado a una primera en Mallorca para dejar claro a los de JoaquÃn Caparrós que, salvo sorpresa mayúscula, mejor harán en defender su privilegiada posición que pensar en metas mayores.
Porque, además, acceder a la segunda competición europea no se le ha complicado tanto como podrÃa esperarse tras tres partidos sin sumar, aunque haya caÃdo de la quinta a la sexta plaza.
Sus rivales tampoco están para tirar cohetes y en estas últimas jornadas la ventaja con la que contaba con respecto a los equipos que se quedan fuera de la zona europea, que era de 8 puntos, se ha reducido solo a la mitad, a los 4 que lleva a Atlético de Madrid y Real Sociedad. Ambos 1 punto por debajo del Sevilla, séptimo.
Y para esa lucha si parece tener el Athletic armas más que suficientes, ya que, después de una tacada de cuatro triunfos consecutivos, obligó tanto a Barcelona como a Valencia a sudar lo suyo las victorias por la mÃnima que le infringieron.
Ante el conjunto che, el Athletic llegó a estar soberbio, con Toquero percutiendo y percutiendo ante una defensa a la que superaba una y otra vez y Llorente de amenaza continua. Guaita y el palo impidieron al campeón del mundo una celebración acorde al fin de semana, en el que su madre y él mismo cumplÃan años.
A los dos delanteros se les añadió un excelente trabajo coral de presión e intensidad durante 60 minutos en los que su equipo ni echó en falta la presencia de una de sus piezas claves, Iraola, que encontró notable relevo en el entregado e incisivo De Marcos, que pudo hasta marcar.
No lo hizo y por ahÃ, por la falta de acierto ante la meta rival se le fue a su equipo una victoria que no hubiese sido injusta y sà más que merecida. Aunque también el Valencia, con JoaquÃn estelar y Mata más que oportuno también hizo sus méritos, sobre todo tras el descanso.
En definitiva, que el Athletic desaprovechó la ocasión de ilusionarse con la Champions, a pesar de seguir demostrando ante uno de los poderosos de la competición que esta temporada está para más que en las anteriores y que su candidatura a la UEFA Europa League es más que sólida.
