Archivo por meses: enero 2011

Dire Straits: Making Movies

making movies Making Movies se grabó los meses de verano de 1980 y se publicó ese mismo otoño. Durante las sesiones de grabación del disco la relación de los hermanos Knopfler se hizo insostenible y finalmente David Knopfler fue sustituido por Sid McGuinnis en la guitarra rítmica y se incorporó a la banda el teclista  Roy Bittan de la E Street Band de Bruce Springsteen.

Tras la partida de David Knopfler, su hermano Mark  dirigió la banda hacia nuevos derroteros musicales y añadió al sonido rock  que les caracterizaba un poco de country y  soul. Su peculiar voz y su manera de tocar la guitarra se convirtieron en señas de identidad del grupo y Mark Knopfler se erigió como el alma creativa de Dire Straits.

La producción de Jimmy Iovine (productor de Born To Run) marcó un cambio hacia unos arreglos y una producción más elaborados y una tendencia a la experimentación (uso de sintetizadores, complejas y largas canciones, mayor protagonismo de los teclados…) que se mantendría a lo largo de la carrera de Dire Straits.

Aun no siendo tan exitoso como Brothers in Arms (1985) Making Movies alcanzó los primeros puestos de las listas  internacionales y consiguió excelentes críticas. De hecho, en opinión de muchos críticos y periodistas musicales, éste es el mejor álbum del grupo Dire Straits.


Rodríguez:Cold Fact

rodriguez-cold-fact Cold Fact fue el álbum de debut del músico Jesus Sixto Rodríguez.  Grabado en Detroit durante los meses de agosto y septiembre de 1969, el disco se editó en el sello Sussex en la primavera de 1970 y  llegó a  Sudáfrica y Australia pocos años después. En estos países del hemisferio sur sí obtuvo el reconocimiento que no había logrado en Estados Unidos.

Adelantándose a la resaca de la contracultura americana Sixto Rodríguez expresó en su música la pérdida de la inocencia de toda una generación, la frustración de una juventud que creyó poder cambiar el mundo y vio sus ilusiones truncadas.

Trovador del gueto y activista por los derechos de los indígenas americanos, Rodriguez presentó en este disco canciones de denuncia social y canciones que relataban sus propias vivencias (drogas, sexo, marginación…).  El disco es un excelente trabajo de psych folk que merece ser rescatado del olvido.