Una de las acciones más directamente relacionadas con el #biencomun es la de COMPARTIR. Pues bien, comparto con todas vosotras, “personas humanas”, la elaboración de los famosos “Sanblases”.
La tradición en la ciudad que me vió crecer Eibar, es que cuando llega el 3 de Febrero, festividad de San Blas, en todas las casas se elaboran las famosas “tortas de San Blas”, que luego son llevadas por los niños de la casa a bendecir envueltas en una servilleta. En esas fechas Eibar huele a Anís.
Guiado por mi madre, gran cocinera (que voy a decir yo), la semana pasada hice una remesa de tortas de San Blas y aquí os dejo su elaboración. Es muy sencilla y os la recomiendo, el éxito y sobre todo la satisfacción de comerlas con quien quieres, es uno de los placeres de la vida a nuestro alcance. Que las disfrutéis!
1 kg. de harina
½ kg. de azúcar normal
½ kg. de azúcar glas (se me ha escapado ponerlo en la fotografía)
250 gr. de mantequilla
7 huevos
1 sobre de levadura
Unas gotas de esencia de anís.
En un bol ponemos 6 huevos y la yema del séptimo, reservando su clara. Con una batidora los mezclamos con el azúcar normal, las gotas de esencia de anís y la mantequilla previamente derretida en el microondas, hasta que quede una pasta homogénea.
En otro bol más ancho, mezclamos la harina con el sobre de levadura.
Hacemos un hueco en la mezcla de harina y levadura para ir echando poco a poco la mezcla de huevos, azúcar y mantequilla para ir amasándolo todo con las manos.
Cuando tengamos una masa homogénea la pasaremos sobre una superficie lisa, limpia y enharinada para acabar su amasado dejándola en forma de rodillo.
Aquí está la jefa (90 años)
En éste punto vamos cortando trocitos de masa con la cantidad que queramos que tenga cada torta y les vamos dando forma. Cada torta la ponemos sobre un trozo de film anti-adherente y las metemos al horno, previamente calentado a unos 200ºC. hasta que veamos que toman un color ligeramente tostado.
Pasado ese tiempo las sacamos del horno y las dejamos enfriar.
Mientras las tortas se enfrían ponemos en un bol la clara que habíamos dejado reservada y la batimos hasta que comience a tomar un poco de cuerpo.
En ese momento vamos añadiendo el azúcar glas tamizado sin miedo ya que nos hará falta mucho (incluso más que el indicado) para que luego seque sobre las tortas.
Lo vamos batiendo todo con generosidad.
Finalmente y cuando las tortas estén completamente frías añadimos sobre ellas esta última mezcla.
Impresionante detalle de la receta, impresionante resultado!!!
gracias!!