El tempeh contiene proteínas de alto valor biológico, es decir, aporta todos los aminoácidos que el cuerpo necesita para funcionar de manera correcta. Elaborado con soja fermentada, es un ingrediente muy versátil en la cocina, que podemos añadir a prácticamente cualquier plato: croquetas, hamburguesas, pastas, estofados…
Tal y como nos explica la nutricionista Gabriela Uriarte, de la misma manera que el tofu, el tempeh se elabora a partir de granos de soja, pero tiene otras características nutricionales y una textura diferente. En el caso del tempeh, el proceso de fermentación de la soja retiene todas las proteínas y comparado con el tofu contiene más fibra y vitaminas, así como una textura más firme y un sabor más fuerte.
No debemos despreciar a la soja y sus productos derivados como fuente proteica; ya que nos aporta más o menos la misma cantidad de proteína que el pollo y, aunque su biodisponibilidad sea más baja, es una fuente libre de colesterol y grasas saturadas.
Es importante mantener un balance entre las fuentes vegetales y animales de proteína para un correcto funcionamiento del organismo, por lo que conocer y añadir el tempeh a nuestra alimentación semanal nos ayuda a estar más sanos y mejor nutridos
La recomendación de Gabriela: tomarlo cocido y aderezado con soja, frito o a la plancha, añadido a un estofado de verduras y como parte de hamburguesas que les otorga la consistencia óptima.