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Érase una vez un antinflamatorio natural llamado Cúrcuma…

El componente activo principal de la Cúrcuma es la curcumina, que se encarga de proporcionar el color amarillo característico a la Cúrcuma, pero no solo aporta color, sino que también es el encargado de proporcionar distintas propiedades beneficiosas a la Cúrcuma. La Curcumina es un polifenol que se encuentra en esta especia, también usado desde hace más de 3.000 años en medicina Ayurvédica.

Tal y como nos explica la nutricionista Gabriela Uriarte, el beneficio más famoso e importante de la Cúrcuma es como antinflamatorio natural, tanto en inflamaciones crónicas como traumáticas.

Asimismo, también ayuda a incrementar la cantidad de enzimas detoxificantes y mejorar la salud a nivel ADN. Frente al colesterol, la Cúrcuma es útil en disminuir los niveles de colesterol LDL (el conocido como malo) y a incrementar el colesterol HDL (el colesterol bueno).

La recomendación de Gabriela: añadiendo esta especia en los platos no se logran los efectos terapéuticos, ya que la cantidad de principio activo no es suficiente, es por ello que es necesario tomarlo en cápsulas.

unapizcadesano:
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