Pompas de papel

Tras Eta handik gutxira gaur y Haragia, Eider Rodríguez llega de nuevo a las librerías con Katu jendea, un libro de relatos que obtuvo la beca Igartza y que ha sido publicado por Elkar. Este nuevo trabajo de la escritora de Errenteria, está conformado por siete historias protagonizadas por gente común que vive situaciones, en principio,también comunes. Eider Rodríguez demuestra de nuevo que es capaz de convertir en buena literatura la convivencia vecinal, un viaje por las carreteras de Castilla, el reparto de una herencia, el verano que un niño saharaui pasa con una familia vasca, incluso, la rotura de una muela. Hace falta, claro, un raro talento para llevar a cabo esta conversión. En Katu jendea encontramos la mirada inconfundible de la autora que se detiene en los conflictos y las contradicciones de los personajes, que no se desliza por el lado amable de las cosas, y que no resulta prejuiciosa a la hora de seleccionar los temas. Eider Rodríguez pone el foco de su narrativa donde la historia lo reclame y logra recrear situaciones con gran verosimilitud. Así mismo, sus personajes, por lo que dicen y por lo que callan, por lo que hacen y por lo que no se atreven a hacer, transmiten con convicción que a lo que asistimos no es otra cosa que una parte de sus vidas.

En este libro, el deseo y la incomunicación entre las personas son ingredientes fundamentales, aunque en cada relato la propuesta de se renueva. Destaca quizás el primero de ellos, Katu jendea, que da título al libro. Es éste un cuento redondo, muy bien desarrollado, que se cierra con verdadera maestría y que nos regala una última frase luminosa, inolvidable.

Txani Rodríguez