Los yogures de soja, elaborados a partir de la proteína de soja coagulada, son bajos en grasas y esa es, precisamente, la mayor ventaja que presentan con respecto a los tradicionales.
Según nos explica la nutricionista Gabriela Uriarte, el perfil de los lípidos de los yogures de soja, mayoritariamente polinsaturados, es compatible con una dieta cardiosaludable. De hecho, es por ello por lo que las bebidas de soja son tan recomendables para estos casos.
La principal virtud del yogur de soja es que, al ser 100% vegetal, no tiene ni un miligramo de colesterol, perfilándose así como una buena alternativa al yogur de vaca tradicional, ya que sus valores nutricionales en cuanto a proteínas son parecidos, pero están exentos de colesterol.
La soja y los productos elaborados de la soja están siempre en el punto de mira por su relación con el cáncer, la menopausia y la tiroides. Lo realmente cierto es que los estudios científicos más potentes y recientes no apoyan la relación entre el consumo de soja y derivados con el desarrollo de cánceres como el de mama, próstata, colon y endometrio, en los que en su mayoría o tiene efecto neutro o ligeramente protector. En el caso de la tiroides, parece que con espaciar la toma del eutirox con la de soja u otros alimentos bociogenos, es seguro.
La recomendación de Gabriela: Para comprar un buen yogur de soja te recomiendo que mires los ingredientes y que selecciones aquellos que lleven solo bebida de soja y fermentos. Que no vayan con azucares añadidos y sobre todo que sean ecológicos y de soja europea.