Pompas de papel

Un escalofrío casi imperceptible. Un ligero cosquilleo. Una inquietud repentina. Un recuerdo imborrable. Eso es lo que se siente al tener entre las manos el cómic Sandman: Los cazadores de sueños, una obra que salió en EEUU hace cinco años y que ahora publica en castellano la editorial ECC. Aluvión de sensaciones por el reencuentro con una serie legendaria, Sandman, una de las obras maestras de la historia del cómic que su creador, Neil Gaiman, cerró hace ya 18 años, aunque el espíritu y la esencia del Señor del Sueño ha permanecido en obras posteriores y en el recuerdo de todos los aficionados.

Los cazadores de sueños es la adaptación al cómic que el gran dibujante P. Craig Russell hizo de un libro escrito por el propio Gaiman e ilustrado por el artista japonés Yoshitaka Amano. Una historia llena de lirismo que nos traslada al Japón feudal y que cuenta la relación de amor entre un joven monje budista y una zorra que, para intentar quedarse con el templo que cuida el monje, ha tratado de engañarle convirtiéndose en una hermosa mujer. La zorra fracasa en su empeño, pero se enamora perdidamente del monje y este, a su vez, no puede apartar de sus pensamientos la imagen de la bella joven.

Y mientras tanto, en una lejana ciudad, un hombre rico y poderoso, versado en las artes ocultas, vive infeliz por la sensación de miedo que le atenaza. Desesperado por ese temor que le domina desde niño, el hombre busca respuestas en los poderes oscuros y urde un hechizo para provocar la muerte del joven monje, que no tiene miedo a nada, y hacerse así con su fuerza. La zorra descubre el siniestro plan y se sacrifica para salvar a su amor, quedando atrapada en un sueño que le llevará a la muerte. El monje, conmovido, viaja hasta el Reino de Morfeo para rescatar a la cautiva, y en ese lance interviene el Señor del Sueño, con su inquietante distancia y su extraña compasión hacia las cuestiones humanas.

Una bella historia, exquisitamente dibujada por P. Craig Russell y que cuenta con el aliciente añadido de las sugerentes portadas originales, firmadas por la artista japonesa Yuko Shimizu. Por cierto, que la editorial ECC está publicando la precuela de Sandman: Obertura. 25 años después del inicio de la serie, Neil Gaiman resucita a su personaje más emblemático. Hay mucho que contar, pero eso lo dejamos para un próximo “comictario“.

Iñaki Calvo