Pompas de papel

Hace doce años, la empresa estadounidense Odyssey localizó a cien millas de Gibraltar el mayor tesoro sumergido de la historia: el cargamento de monedas de oro y plata que transportaba el galeón español Nuestra Señora de las Mercedes, hundido por barcos de guerra británicos en 1804. A este hallazgo le siguió un largo litigio que concluyó cinco años después con la devolución del tesoro expoliado. Dicho así, suena a historia llamativa, pero los detalles la convierten en una historia apasionante. Y esos detalles los conoce bien Guillermo Corral, diplomático nacido en Portugalete que vivió la lucha legal contra los cazatesoros desde su puesto, primero en el ministerio de cultura y luego como consejero en la embajada española en Washington.

Corral, amante de la fotografía y la escritura, quería contar lo que ocurrió durante esos cinco años de pelea y se puso en contacto con el ilustrador valenciano Paco Roca. El autor de cómics tan conocidos y premiados como Arrugas, Memorias de un hombre en pijama ó Los surcos del azar tuvo claro que allí había una gran historia, pero Guillermo Corral apostaba por una aventura al estilo Tintín y Paco Roca prefería ceñirse a los hechos reales. Y el resultado final es una mezcla equilibrada que deja un regusto magnífico, con homenaje incluido a Tintín en el sensacional dibujo de portada.

Bajo el título de El tesoro del Cisne Negro, y con los nombres cambiados para evitar problemas legales, Roca y Corral nos cuentan cómo la empresa Ithaca localiza el santo grial de los cazatesoros, un navío hundido con su carga completa, lo que se llama el “cisne negro”. Todo apunta a que se trata de La Merced, un buque español, pero no hay pruebas de ello y desde el ministerio de cultura empieza una carrera contra el tiempo para demostrar la nacionalidad del barco y recuperar el tesoro. La empresa Ithaca cuenta con importantes apoyos económicos y políticos, pero el joven diplomático Alex Ventura, sosías de Guillermo Corral, una funcionaria, un ministro y un veterano abogado estadounidense forman un grupo cuyo trabajo permitió, por extraño que resulte, el triunfo de la justicia y la victoria de “los buenos“.

Además de tensión, intriga y aventura, el cómic de Roca y Corral rinde homenaje a tantos funcionarios y diplomáticos que hacen su trabajo con eficacia y brillantez y que nunca figuran en los libros de historia. Cuando la editorial vasca Astiberri publicó a finales del año pasado El tesoro del Cisne Negro, los 20.000 ejemplares de la primera edición se agotaron casi el primer día. Éxito de ventas, y también de crítica, al que me sumo con entusiasmo. No os lo perdáis.

Iñaki Calvo