El periodista donostiarra Xabier Arzelus es un gran aficionado a los libros de viajes “raros”. Uno de sus últimos descubrimientos ha sido las andanzas de un pequeño velero llamado “Ifarra” que, desde sus construcción y botadura en Pasaia en 1947 hasta su venta a un americano en el año 1954 realizo varios cruceros a lo largo del Cantábrico. Nos explica Xabier que su mayor “hazaña” fue la ida y vuelta que realizo de Donostia a Plymouth en el año 1954 con sólo su capitán Juan Gamecho y un tripulante Arturo de Unzin. Navegación con la que intentaron acallar las socarronas criticas de los que aseguraban que no pasarían de Getaria. En aquellos tiempos de la postguerra las embarcaciones de recreo eran una excepción y en ellas tenia fijas las agudos comentarios de los “lobos de mar” de toda la vida.

El autor del libro, descubierto por Xabier Arzelus, es Arturo de Unzin, funcionario de la Diputación de Gipuzkoa, tripulante del “Ifarra”. El capitán y propietario del barco era Juan Gamecho de familia marinera de Elantxobe aunque afincado en Donostia.

El libro esta escrito en primera persona en la misma embarcación. Narra con detalle la navegación hasta Plumouth. Fue muy lenta, tardaron nueve días ida y otros tantos de regreso. Sin radio y, a veces, sin luces de navegación. Las peripecias fueron diversas pero finalmente arribaron a puerto con lo que acallaron para siempre a los “criticones” del muelle donostiarra.

Arzelus calcula que el Ifarra tenia diez metros de eslora. Realizaron diversos cruceros por el Cantábrico alcanzando las costa gallegas de Ribadeo. En una de sus travesías hasta Cantabria embarcaciones del Club Náutico de Santander les confundieron con regatistas ingleses, al contestar en castellano no les hicieron caso.

En la ruta hacia Plymouth vieron dos cachalotes. Se marearon y apenas durmieron. Llegaron de madrugada al puerto ingles. En el trayecto pasaron hambre pero en Inglaterra tuvieron la oportunidad de saborear el famoso “hot dog” que era desconocido en Donostia.

Xabier Arzelus y la familia de Arturo Unzin han cedido el manuscrito con muchas fotos de la aventura del Ifarra al Untzi Museoa de Donostia. Se puede consultar en su biblioteca.