Thor Jurodovich Kostich es un fotoperiodista barcelonés muy viajero proveniente de una familia circense de espíritu nómada y bohemio. En la Casa de la Palabra relata uno de sus últimos periplos. Thor se adentro en el desierto Líbico en Egipto frontera con Libia para llegar al osais de Siwa. Este fue uno de los lugares predilectos de Cleopatra VII en donde gustaba bañarse en sus aguas cristalinas. En la antigüedad era un lugar celebre porque se encontraba el oráculo de Amón al que acudió a consultar Alejandro Magno para verificar que era hijo de los dioses.

En el oasis de Siwa se conservan costumbres ancestrales, algunas de ellas muy particulares, por ejemplo hasta hace poco se concertaban matrimonios entre hombres que debían de mantener el celibato hasta los 40 años. Las mujeres llevan el rostro cubierto con el velo característico de su tribu. Al sur de Siwa se extiende el llamado Gran Mar de Arena en donde se perdieron cincuenta mil hombres del ejercito del rey persa de Cambises II en el año 525 a. C.

Thor comenzó la ruta en Alejandría desde donde se dirigió al oasis de Siwa. Esta ciudad mediterránea le recordó a la Barcelona anterior a los Juegos Olímpicos. El periplo termino en El Cairo en donde aconsejo ver la danza-meditación de los derviches giróvagos y la Ciudad de los Muertos, un gran cementerio ocupado por los vivos que han hecho de él su hogar.

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