Inteligencia emocional

Escuchar para entender

escucharHe leído un artículo sobre cómo escuchar y me ha parecido interesante comentarlo.

Lo que dice este artículo es que la persona que te cuenta un problema, ya habrá pensado mucho sobre cómo solucionarlo y habrá ya hecho muchas cosas para intentar solucionarlo. Así que, antes de sugerir soluciones, nos debemos dar cuenta que desde fuera todo se ve muy sencillo, pero por dentro no lo es tanto, si lo fuera la persona ya habría llegado a la solución.

Por otra parte, habla de que no podemos aportar una buena solución a un problema que no hemos entendido. Por ello, lo primero entender el problema y además procurar que el otro se sienta comprendido (esta idea ya la propone Covey en sus 7 hábitos). Cuando el otro se siente comprendido es más fácil que tenga en cuenta nuestra opinión. La cuestión es no precipitarnos en aconsejar, mejor escuchar y preguntar mucho antes de dar un consejo. Y en muchas ocasiones mejor no aconsejar, quizás la otra persona lo único que quiera de nosotros es que le escuchemos.

Y aquí se liga el asunto de los juicios. Cuando alguien nos cuenta algo, nuestro cerebro extrae conclusiones demasiado rápido y del tipo, ha actuado bien o ha actuado mal (con muy pocos matices), con el tiempo podríamos llegar a matizar. Cuando alguien nos cuente algo agradecerá que no le juzguemos, le hará sentirse más cómodo y entendido.

Una frase de André Malraux:

Si de verdad llegásemos a poder comprender, ya no podríamos juzgar.

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