Archivo por meses: septiembre 2013

Sir Lawrence

Puso voz a los colores de un hongo atómico. Narró la guerra de Vietnam. Desde 1956 hasta 1973 informó de los mayores acontecimientos en el este de Asia, incluida la entonces hermética China y su Revolución Cultural.

Y lo hacía de forma única, a través de pequeñas escenas cotidianas. Así lo cuenta The Guardian:

Anthony Lawrence - Foto: The Guardian

Anthony Lawrence – Foto: The Guardian

” (…)Se valía de escenas del día a día para interpretar complejos sucesos políticos para una audiencia a miles de kilómetros, en el Reino Unido. Sus notas de radio en programas como From Our Own Correspondent fascinaron a muchos oyentes, incluido un joven John Humphrys (…)”

Periodistas que acercan. Periodistas que provocan. Periodistas que crean nuevos periodistas. Después de jubilarse en la BBC Anthony Lawrence se instaló en Hong Kong donde ha fallecido esta semana. Tenía 101 años.

¿Existen Anthony Lawrences hoy en China? Vivimos otro mundo, otros tiempos, todo está al alcance de todos y todo está contado…¿o no? 101 años… 101 East. La edad de Sir Lawrence me ha llevado hasta este programa. Una de las ventanas más atractivas que conozco para asomarse a lo que pasa en esta parte del mundo.

Por eso digo, sí quedan. En la televisión y sobre todo en la prensa escrita. Pocos, selectos, pero quedan. Aquí va una lista, mía, particular y absolutamente subjetiva, de cirujanos de la actualidad, maestros en lo suyo que han recorrido el mismo camino que el británico centenario, han pasado por China, y gracias a su estilo han pintado alguna de las crónicas más frescas de los últimos años. A quien busque grandes y pequeñas historias actuales sobre China les recomiendo que empiecen a tirar de la madeja por estos artículos y que luego, si quieren, buceen en otros anteriores y en los libros que han escrito.

Señores y señoras con swing, a través de sus correspondientes artículos-despedida. Periodistas que crean periodistas.

Evan Osnos – The New Yorker
A billion stories

John Garnaut – Fairfax Media
China inside out

Melissa Chang – Al Jazeera English
Goodbye to China, country of contradictions

Jonathan Watts – The Guardian
China: witenssing the birth of a superpower

Violencia, (sin) razón

La explosión mata a dos personas. Una de ellas, el mismo hombre que acaba de volar por los aires su carrito frente a un colegio en Guilin. Al parecer es un trabajador inmigrante de 44 años. Al parecer su hija había tenido problemas para ser escolarizada en ese centro.

En China los hijos de inmigrantes registrados en otras provincias no tienen derecho a la educación pública (ni a la sanidad, ni a otros muchos servicios).

Fotograma de la película "A touch of sin" de Jia Zhangke

Fotograma de la película “A touch of sin” de Jia Zhangke

Un hombre en silla de ruedas grita dentro de la Terminal 3 del aeropuerto de Pekín. Amenaza con activar un explosivo casero que dice llevar. Lo hace. El único herido es él pero la terminal se llena de humo y en el aeropuerto reina el caos. Al parecer protestaba por la falta de ayudas. Al parecer llevaba años denunciando que había quedado parapléjico a causa de una paliza propinada por unos guardias de seguridad.

En China el sistema de cobertura social es aún muy limitado. En China existen unidades parapoliciales llamadas Chengguan (城管). Se encargan del orden en la calle, actúan muchas veces al margen de la ley.

Un hombre entra en un supermercado. Con el cuchillo que acaba de comprar ataca al azar a otros clientes. Mata a una mujer y hiere a otras 3 personas, incluido un bebé de dos años. Al parecer…

Todos son casos que ocurridos en los últimos 2 meses. Hay al menos una docena más, todos distintos, todos similares. “China lucha por comprender la avalancha de actos violentos al azar” , titulaba en un artículo el Washington Post.

Por fin, en Noviembre, se estrenará en China la última película de Jia Zhangke “A touch of sin”. “Hay muchos problemas sociales ante los que la gente al final se rebela y que dan como resultado grandes tragedias“- ha dicho el director en una entrevista con el New York Times.

China no tiene el problema de las armas de fuego de Estados Unidos. China tiene el problema de no dejar hablar de sus problemas. Ni de sus causas. Ver esta película proyectada en las pantallas de todo el país no cambiará nada pero da la sensación de señalar hacia la solución.