Inteligencia emocional

Con Alex Txikon e Ishaq Akhon en el XIX Mendizale Eguna.

Como todos los mayos desde hace ya diecinueve, éste también hemos recordado a Juanlu en el Mendizale Eguna. Mientras siga escalando por la memoria de su cuadrilla, seguirá acudiendo a la cita.

Una vez más, Baltistan ha estado en Etxebarri. Este año hemos contado con el alpinista lemoatarra ALEX TXIKON como telonero -así se presentó él desde Leonidion (Grecia)- de nuestro amigo porteador y cocinero baltí del GARIBOLO, ISHAQ AKHON.
De su mano hemos caminado hacia el Gasherbrum I en el invierno de 2012. En una expedición de la que tres ascendieron y no regresaron: Göschl, Hählen y Hussain.
De una amistad forjada en las alturas del Campo Base.
De congelaciones. Y de esperas.
A los compañeros de cordada. Al “ángel de la guarda” en forma de helicóptero de rescate. Diez heladores días de soledad compartida.
De esas decisiones que siempre son un momento de locura.
De la resolución de Akhon, por acompañar a su compañero herido a pesar de los riesgos. Y esperar la llegada de ayuda con desesperada confianza.
De la determinación de Alex cuando los rescatadores decían tener una sola plaza en el helicóptero. Y de su respuesta: o bajamos los dos o no baja ni dios.
De un final feliz, a salvo los dos, entre “lágrimas de vida”.
De los mitos sobre alpinistas con superpoderes. De emociones. De amor a la montaña y de pasarlo mal, muy mal.
De paseos familiares como esencia del alpinismo. De valores y de lo efímero de un ochomil respecto a echar una mano al prójimo.
Con ambos hemos descubierto que la cima de un ochomil no está “ahí arriba” sino en el campo base. Que más importante que subir es bajar.
Que el mayor obstáculo en la ascensión siempre es tu ego, el más difícil de franquear. ¡Ay, la conquista de lo inútil que nos decía Juanjo San Sebastián!
Que ascender es trabajo en equipo. Como la ascensión invernal al Manaslu el 6 de enero. Que un error en la cocina arruina la mejor expedición. Que a 5.000m (también a nivel del mar) se necesita tu mejor versión.
Que sin sherpas no hay ochomiles. Que son personas al lado de las cuáles empequeñecemos. Que son titanes en tierra de gigantes. Que más nos valiera despojarnos de tanta arrogancia y aprender de su humildad.
Alex, Akhon, eskerrik asko!

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