“Nada de fotos, por favor. Hay mucha gente que se cree que soy el responsable de Internet durante los últimos años y puedo tener problemas”. Son las primeras palabras de Kamel Saadaoui, director general de la temida Agencia de Internet de Túnez (ATI, por sus siglas en francés), que está deseoso de explicar su trabajo “una labor puramente técnicas, este organismo lo formamos sesenta ingenieros e informáticos y los único que hacÃamos era facilitar a las autoridades los mecanismos necesarios para controlar la red, pero no éramos nosotros los que decidÃamos qué censurar. No somos policÃas, somos ingenieros. Además, cuando decidÃan censurar una página o un blog, encriptaban toda la información y nosotros sólo veÃamos que estaba bloqueado, nada más”.
Saadoui repasa mentalmente las cifras de páginas bloqueadas y asegura que “empezaron con unas trescientas, pero con el inicio de las revueltas ya eran varios miles, no todas de contenido polÃtico, muchas de ellas de proxys que usaba la gente para saltarse los filtros”. ¿Por qué el Gobierno no cortó Internet o redujo la velocidad de conexión cuando empezaron las revueltas al igual que hizo Irán en 2009 tras las elecciones presidenciales? “Porque no eran conscientes del poder de convocatoria de la red, no se dieron cuenta del daño que la red les estaba haciendo, es la única respuesta posible”. Túnez sufrÃa una fuerte censura en Internet, pero también una increÃble expansión de la red de alta velocidad a la que tienen acceso en medio millón de hogares, según los datos de ATI.
Situada en una bonita villa en el número trece de la calle Pasteur y sin apenas seguridad en los accesos, los empleados de la ATI tienen ahora “tiempo para tomar café las ocho horas de trabajo cada dÃa”. El director explica que en sólo una semana se han dado grandes pasos en la administración de Internet y que a partir de ayer, dÃa 24, “el correo electrónico es ya libre en el paÃs. Antes controlábamos cada email y las autoridades tenÃan capacidad de leer su contenido, hoy cualquiera puede tener su servicio SMTP”.
Pese a la libertad en la red y el levantamiento de la censura a las páginas de contenido polÃtico, “los filtros se mantienen sobre páginas de contenido erótico, pornográfico y pedófilo. El gran cambio es que a partir de ahora será la Justicia la que decida lo que hay que filtrar, no el partido polÃtico del poder”.
Saadoui mira con simpatÃa al nuevo secretario de Estado de Juventud y Deportes, Slim Amamou, @slim404, un conocido programador informático y hacker al que se le incluye en el grupo de Anonymous que logró bombardear la mismÃsima web personal del presidente Ben AlÃ. “Luchábamos cada dÃa contra ellos, hicieron muy bien su trabajo y, de verdad, que nosotros somos los primeros en alegrarnos del triunfo de la revolución”, afirma Saadoui.