La última novela del escritor alavés Amado Gómez Ugarte nos lleva a los momentos previos a la proclamación de la Segunda República, durante el reinado de Alfonso XIII y la dictadura de Primo de Rivera. La acción de este divertidísimo libro transcurre en el valle de Ayala, donde vive el conde de Berganza, ateo, contrario al régimen político, y casado con una mujer muy religiosa. La hija de ambos, Rosamar, es la verdadera protagonista de la historia. Se trata de una joven muy particular, a quien en su entorno consideran un verdadero trasto, que dará pie al primero de los grandes embrollos del libro. El rey visita la zona y la familia del marqués de Urquijo le entrega una gallina llodiana, toda una rareza. Entonces, el conde de Berganza, enredado por su hija, y por el absurdo afán de competir, le entrega una falsa rata verde, un acto que los republicanos se encargarán de revestir de simbolismo. En la fiesta de la recepción real, Rosamar conocerá un chico rubicundo, que se presentará como el hijo del marqués de la Secana, y la besará robándole así el corazón.

Por otro lado, su institutriz y el administrador de fincas de los Berganza, Werner, un hombre bueno y culto, comenzarán un romance que Rosamar tratará de boicotear por todos los medios. La verdad es que las situaciones disparatadas se sucederán en esta comedia de enredo que tiene, además, una inmejorable galería de personajes secundarios. Destaca, entre todos ellos, la hermana de la madre de Rosamar, una mujer moderna y liberada, que llega de visita desde el París más loco. Todo un contraste con la beatería que domina la casa y el país.

Los verdes campos es un libro muy bien escrito, muy divertido (entre otras cosas, hay una carta de amor desopilante), con un ritmo envidiable y toques de la literatura de la Belle Époque, y de las comedias de Jardiel Poncela. La verdad es que esta novela breve se presenta sin pretensiones pero que, como sucede a menudo con el humor y la ironía, tras la diversión esconde una carga de lucidez considerable y una crítica velada al sistema de aquella época, extrapolable en muchos sentidos al de la época actual, a la que tampoco le faltan enredos.

Amado Gómez Ugarte es autor de libros de gran calidad como La Secana o Para siempre y tiene en su haber numerosos premios literarios de gran prestigio. Entre ellos, el premio de novela corta Gabriel Sijé, el Ciudad de San Sebastián o el Julio Cortázar.

Txani Rodríguez