El Agujero Negro. Flores

Por fin ese día se decidió. Compró un generoso ramo de rosas y se las llevó y allí mismo le dijo todas esas cosas que siempre se había guardado, se atrevió a soltar sus sentimientos a corazón abierto hasta que palabras y llantos fueron todo uno, en aquel maldito día de todos los santos.

Roberto Moso

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