La primera entrega de novedades de junio de 2017

JOOST DE VRIES

La república      (ANAGRAMA)  283 páginas

Joost de Vries (Alkmaar, 1983), periodista, historiador y crítico de arte, es una de las grandes promesas de la literatura holandesa. Debutó en 2010 con Clausewitz, una novela en la que rendía homenaje a Harry Mulisch, y hace cuatro años publicó La república con la que ganó varios premios. Esta novela es una crítica despiadada del mundo universitario y una airada denuncia de los comportamientos neofascistas que han arraigado en parte de la sociedad holandesa. Tras la muerte en extrañas circunstancias del historiador, experto en Hitler, Josip Brik, su discípulo y colaborador Friso de Vos maniobra para convertirse en el heredero oficial del muerto, entre líos de amor y desamor con su novia Pippa y una lucha sin cuartel con su rival, Philipe de Vries. Irónico y repleto de guiños al mundo cultural.

DOLORES PRATO

Quemaduras        (MINÚSCULA)  71 páginas

Dolores Prato (1892-1983) es una escritora que está empezando a ser valorada y recuperada en su país natal, Italia. Instruida por sus tíos y por unas monjas, se dedicó a la enseñanza en la escuela pública desde 1918 hasta 1927, cuando por su oposición al fascismo no le quedó más remedio que vivir dando clases particulares. Tras la II Guerra Mundial colaboró con varios medios y publicó dos libros, Sangiocondo (1963) y Quemaduras (1967). Otro libro más, Giù la piazza non c’è nessuno fue publicado mutilado en 1980. La edición íntegra no apareció hasta 1997. Quemaduras es un cuento largo de claro aliento autobiográfico en el que la autora cuenta la adolescencia de una chica entre los muros de un colegio de monjas. Una mirada a una joven furiosa de la anciana desilusionada en la que se convirtió. Exquisito.

LAURENT MAUVIGNIER

En la turba    (NOCTURNA)  396 páginas

El 29 de mayo de 1985 Bruselas se preparaba para la final de la Copa de Europa de fútbol entre dos grandes, la Juventus y el Liverpool. Una hora antes de que comenzara el partido dos centenares de hinchas británicos acorralan a los aficionados italianos en una zona del estadio. Aprisionadas contra las vallas, treinta y nueve personas mueren aplastadas y más de seiscientas resultan heridas. Sin embargo, el partido se celebró mientras se apilaban los cadáveres en un espacio anexo al campo. El escritor francés Laurent Mauvignier (Tours, 1967) rememora aquellos terribles sucesos acercándose  a las vidas rotas de varios de los supervivientes tres años después de la tragedia. Una novela sobre el fanatismo futbolístico y la violencia de las masas. Un ejercicio de estilo calificado de “magistral”.

NONA FERNÁNDEZ

La dimensión desconocida   (RANDOM HOUSE)  233 páginas

Nona Fernández (Santiago de Chile, 1971) es uno de los grandes secretos a voces de la literatura latinoamericana. Una escritora y actriz que ha publicado un volumen de relatos y seis novelas, y que es autora de dos obras de teatro llevadas a escena por su compañía La Pieza Oscura. La dimensión desconocida es su obra más reciente. Parte de un hecho real, la confesión en plena dictadura ante un periodista de la oposición de un hombre angustiado que se presenta como agente de la policía secreta y torturador. Y que empieza a desgranar lo que hasta ese momento era una dimensión desconocida. La autora rescata algunas de esas vidas torturadas: un hombre secuestrado cuando llevaba al colegio a sus niños, un niño testigo de una masacre, un preso que cree ver una nave espacial… La iluminación de una zona de locura y extravío.

MIGUEL SÁNCHEZ-OSTIZ

Rumbo a no sé dónde     (PAMIELA)  366 páginas

Nueva entrega de los diarios de ese genio de nuestra literatura que es el escritor navarro Miguel Sánchez-Ostiz (Iruña, 1950). Tras dedicarse a denunciar, en forma de novelas, la actuación de los verdugos durante la Guerra Civil y la posguerra en Navarra en dos libros imprescindibles, El Escarmiento y El Botín, Sánchez-Ostiz nos muestra sus reflexiones de 2015. Un diario en el que se reflexiona sobre lo vivido y sobre lo poco que pueda quedar por vivir. “A cierta edad la vida ya ha sido, sostenía Tabucchi, y no le replicaba nadie. A cierta edad lo que queda es otra cosa, reminiscencia, relleno, inquietudes materiales si no has andado vivo… A cierta edad no estás para lirismos ni para virguerías esteticistas. ¿Para qué estás carajo, para qué?”. Reflexionando cuando se cumplen veinticinco años de Las pirañas, una obra maestra.

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